Estados Unidos
Juan Ramón de la Fuente presume en EU la lucha de la 4T contra la migración y el fentanilo
Sobre los amagos de Donald Trump de lanzar al ejército contra los grupos criminales mexicanos, el canciller dijo que México es un país soberano que no aceptaría una intervención militar en su territorio.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- De visita en Texas para acercarse a la comunidad mexicana ante las amenazas de Donald Trump contra los migrantes, el canciller Juan Ramón de la Fuente recalcó que el gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo ya está haciendo un trabajo "muy importante" para reducir el flujo de migrantes y el tráfico de fentanilo, dos exigencias principales de Washington en la relación bilateral entre Estados Unidos y México.
"México tiene modelos que están funcionando para tratar de contrarrestar estos problemas y queremos que eso se tome muy en consideración, todos estos son perfectibles, pero es muy claro que estamos actuando al respecto", aseveró el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores en una conferencia de prensa.
El exrector de la UNAM recordó que el número de migrantes detenidos por las autoridades de Estados Unidos cayó en un 75% respecto al año pasado, y presumió la confiscación reciente de una tonelada y medio de fentanilo como "el mayor decomiso de la historia", y como un primer logro del "nuevo plan de seguridad" de Sheinbaum.
“Vámonos a los hechos y el hecho que les pido transmitan, porque es un hecho incontrovertible, que el mayor decomiso de fentanilo en la historia se acaba de hacer en México", declaró el jefe de la diplomacia mexicana.
Preguntado sobre los amagos de Trump de lanzar al ejército de Estados Unidos contra los grupos criminales mexicanos, De La Fuente planteó que esa idea no es nueva, pero que nunca ha prosperado porque no se puede designar a las organizaciones delincuenciales como terroristas, y que México es un país soberano que no aceptaría una intervención militar en su territorio.
Durante su estancia en Texas, De La Fuente se reunió con 11 cónsules de la región, con abogados que ofrecen servicios legales a la población migrante y con líderes de la comunidad mexicana instalada en la zona fronteriza, a quienes refrendó que el gobierno priorizará la defensa de sus connacionales ante las políticas antimigrantes de Trump.
El político también sostuvo que México solo recibirá en su territorio a los deportados de origen mexicano, una manera de descartar un acuerdo similar al que el expresidente Andrés Manuel López Obrador pactó con Trump durante su primer mandato, en el que las autoridades estadunidenses devolvían a migrantes extranjeros a México de manera automática e inmediata.