CHILPANCINGO, Gro (apro).– La alcaldesa morenista de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández Martínez, aseguró que su gobierno no incurrió en ninguna ilegalidad al permitir que el síndico Andrei Yasef Marmolejo Valle realizara su boda civil en la terraza del Ayuntamiento de Chilpancingo, además de que él cumplió con todos sus pagos ante la administración para acceder a ese espacio.

“Fue un evento civil, no se celebró ninguna fiesta y el síndico hizo su solicitud y sus pagos, y ese balcón o terraza siempre ha sido un espacio de recepción, a veces ahí hago reuniones privadas, sociales y conferencias, y fue todo un asunto civil que no duró más de una hora”, dijo en conferencia de prensa.

Además ofreció a los asistentes todos los espacios del Ayuntamiento para quien quiera utilizarlos, después de pagar a la administración municipal; nunca mostró un tabulador de precios.

La regidora del PAN Reynalda Pablo de la Cruz, quien acudió a escuchar la conferencia de prensa, le atajó en medio de los reporteros que esperaba mayor información sobre el uso de estos espacios en la sede municipal. “Lo que esperamos es que nos presente a la brevedad posible el reglamento para el uso de ese espacio que ha sido institucional y de respeto”, comentó.

La alcaldesa morenista había dicho antes que han rentado, por ejemplo, el auditorio del edficio del ayuntamiento.

El asunto es que nunca antes en un espacio tan privado, como la terraza, a la que sólo se llega por la oficina de la alcaldesa, la sala de juntas y la Secretaría General de Gobierno habían celebrado una ceremonia similar y menos lo habían puesto al servicio del público.

El pago

Después de la conferencia de prensa, en entrevista, la alcaldesa fue cuestionada sobre el por qué nunca antes habían ofrecido este espacio, y dijo porque “nada más era para ciertas cuestiones”. Pero alguien de su equipo intervino y mencionó que nadie antes lo había solicitado, y la alcaldesa sólo repitió: “Nadie lo había solicitado”.

La alcaldesa, ella misma aclaró, estuvo en ese enlace matrimonial porque fungió como testigo de los novios.

El asunto que también fue cuestionado por usuarios en las redes sociales es que el lugar, la terraza, fue acondicionada para el enlace matrimonial. Fueron colocadas flores, velas y mobiliario para ambientarlo.

La alcaldesa pidió al director del Registro Civil, Miguel Ángel Torreblanca Ruano, que explicara en la conferencia de prensa el tema de la boda. “El síndico realizó un pago, pagó totalmente sus derechos como cualquier ciudadano, de 710 pesos en oficina”. Nunca mostró un recibo de pago.

El monto que pagó el síndico tampoco queda claro. Marmolejo Valle escribió a manera de respuesta en uno de los tantos cuestionamientos que le hicieron en las redes sociales que pagó al Ayuntamiento mil 500 pesos por el uso de la terraza para su enlace civil.

“Como ven, no incurrimos en nada ilegal, todo es un tema de polarizar y no sé por qué”, insistió la alcaldesa, quien obvió los principios de su partido.

Además, pareciera que banalizó el tema porque, expuso, la boda de su compañero de Cabildo sería un parteaguas para que “todo el que desee casarse pueda hacerlo en el balcón”.

Reprueban influyentismo

La actuación de la alcaldesa y el síndico no fue bien vista por sus compañeros de partido, en particular, el dirigente estatal de Morena, el diputado local Jacinto González Varona, quien cuestionó el proceder del gobierno municipal de origen morenista, al mencionar que los principios rectores del partido rechazan cualquier acto frívolo, de influyentismo o de tráfico de influencias.

Aclaró también que el síndico no está afiliado a Morena, pero, expuso, la alcaldesa está en la responsabilidad de asumir los principios de la Cuarta Transformación; le hizo un llamado para que se sujete a ellos.

“Desde mi posición como dirigente sí es reprobable. El mismo documento de nuestro partido, nuestra declaración de principios, habla de que luchamos contra el tráfico de influencias, luchamos contra el abuso del poder, y el abuso del poder no nada más es golpear a alguien, es utilizar nuestro cargo para hacer cuestiones como esta”, comentó.

Calificó el caso de la boda civil como un acto penoso para el partido, y convocó al síndico y a la alcaldesa, si no están preparados, a acudir a los cursos de formación política que ofrecen en la dirigencia estatal y a releer los estatutos de Morena.