CIUDAD DE MÉXICO (apro).– El excandidato presidencial panista Ricardo Anaya Cortés inició su mensaje semanal en Twitter con una afirmación:

“Hoy que es día del trabajo, es también el día del aspiracionismo. Felicidades a los aspiracionistas que sí trabajan, pagan impuestos y aspiran a una vida mejor para sus familias. Ojalá López Obrador entienda que no hay mejor política social que el trabajo bien pagado”.

Bajo el tuit, colocó su video semanal que suele dedicar cada lunes a criticar algún aspecto de las políticas del actual gobierno y que, en esta ocasión, fue a la política económica y algunas expresiones presidenciales.

En concreto se refirió a la forma en la que López Obrador ha criticado lo que suele llamar “una actitud aspiracionista” como si trabajar y aspirar a una vida mejor fuera un defecto.

“El gran problema de López Obrador es que no entiende que la mejor política social que existe, lo mejor que se puede ofrecer a una persona, es un trabajo bien pagado y, justamente, porque no entiende la importancia del trabajo bien pagado, se ha dedicado a ahuyentar inversiones y a convertir su sexenio en el de las oportunidades perdidas”.

Agregó que con esa actitud del mandatario hacia la clase media desalienta a quienes aspiran a una vida mejor.

Para ilustrar lo anterior, el también exdirigente nacional del PAN repasó diversos proyectos cancelados: el aeropuerto de Texcoco y la planta de Constellation Brands.

También cuestionó el paquete de reformas aprobadas al vapor el pasado viernes en el Senado de la República, pues sostuvo que concentran más poder en el Ejecutivo, inclusive para cancelar contratos, revocar concesiones y expropiar”.

“¿Sabes qué provoca todo esto? Muy simple: que se frenen las inversiones que podrían generar los trabajos bien pagados que la gente necesita”, dijo.

El panista admitió en su mensaje que hay personas que necesitan apoyos del gobierno, pero insistió en que un gobierno que sólo reparte apoyos olvida que el trabajo es lo que dignifica a las personas.

“Ojalá que este gobierno entienda, antes de que sea muy tarde, que no hay mejor política social que el trabajo bien pagado; que nunca habrá dinero que sustituya la dignidad del trabajo, ni apoyo que reemplace los beneficios del empleo”, insistió.