TOLUCA, Méx. (proceso.com.mx). –Emilio Arriaga, expresidente municipal de Ocuilan, fue sentenciado a 75 años de prisión por el delito de secuestro cometido en contra de un colaborador de quien fuera su contendiente perredista a la alcaldía, Vanessa Linares.

También deberá pagar multa de 6 mil 500 días equivalentes a 582 mil 530 pesos, y sus derechos civiles y políticos quedaron suspendidos.

Arriaga Villa fue encontrado culpable de hechos ocurridos el 4 de junio de 2021 sobre la carretera Santiago-Chalma, donde una persona que conducía un vehículo marca GMC fue interceptada por los tripulantes de una camioneta tipo Blazer.

De esta unidad descendieron tres sujetos, quienes portaban armas de fuego con las que amagaron a la víctima y la obligaron a subir a un automóvil para trasladarlo a la localidad Santa Ana.

“En ese sitio se encontraba Emilio Arriaga Villa, quien amenazó y agredió verbalmente a esta persona y dio la orden para que la trasladaran a otro punto de la zona”, expuso la Fiscalía.

En ese lugar la víctima fue liberada, y a pesar de que los involucrados realizaron detonaciones de arma de fuego, el denunciante no resultó lesionado.

El alcalde electo fue detenido en Cuernavaca, Morelos, en diciembre de 2021, tras su toma de protesta, por elementos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), quienes contaron con el apoyo de sus homólogos de Morelos.

Después, fue trasladado al Estado de México e ingresado al Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Tenancingo, donde se encuentra actualmente.   

Durante casi un año, desde el penal, Emilio Arriaga, postulado en su momento por el partido Encuentro Solidario (PES), controló la administración municipal a través de la designación de presidentes municipales por ministerio de ley fieles a su causa. Apenas a finales de noviembre su suplente, Wilfrido Pérez Segura, pudo asumir la alcaldía.