CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- Durante los 11 meses que Arturo Zaldívar dejó de ser ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), no presentó algún asunto de fondo o que generara algún criterio, ni en el Pleno ni en la Primera Sala.

La Primera Sala conoce los asuntos de índole civil y penal que llegan en amparos, contradicción de criterios, incidente de inejecución de sentencia, entre otros.

Desde el 7 de noviembre, luego de presentar su renuncia, Zaldívar acordó con la ministra presidenta Norma Lucía Piña Hernández dejar de acudir a las sesiones de la Corte en la Sala y el Pleno para no incurrir en conflicto de interés, por lo que dejó pendientes algunos casos donde ya tenía proyectos y otros donde no.

Entre los asuntos pendientes que dejó el ahora ministro en retiro está la acción de inconstitucionalidad contra la ley que reformó al Conacyt, hoy Conahcyt, y que fue recibida en julio junto con las impugnaciones a las reformas aprobadas durante el llamado “viernes negro” en el Senado de la República.

También la controversia constitucional del Congreso de Nuevo León en contra del ahora gobernador con licencia Samuel García por la falta de publicación de decretos sobre impuestos.

Ante la ausencia de Zaldívar, en la sesión del miércoles 15, el ministro presidente de la Primera Sala, Jorge Mario Pardo Rebolledo, pidió al ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena presentar los proyectos que su excompañero dejó listos para votación.

Entre esos proyectos está el amparo en revisión 636/2022 promovido por el Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE) y la asociación civil Balance Promoción para el Desarrollo y Juventud, que busca despenalizar el aborto en Sinaloa, y otro asunto similar sobre el mismo tema en Tamaulipas.

También dejó pendientes amparos para acelerar la libertad de personas en prisión preventiva oficiosa; en contra de los procesos penales por violencia familiar y amenazas, y sobre la restitución internacional de menores de edad.

La terna

El presidente Andrés Manuel López Obrador ya mandó al Senado su propuesta de terna, integrada por tres mujeres militantes del partido Morena y funcionarias del actual gobierno, para sustituir a Zaldívar Lelo de Larrea, cuya renuncia ya fue aprobada por la Cámara Alta.

La terna la forman Bertha Alcalde Luján, Lenia Batres Guadarrama y María Estela Ríos González; si alguna de las tres obtiene los votos necesarios en el Senado para ocupar el puesto que dejó vacante Zaldívar en la Corte, resolverá casos que serán de interés del Ejecutivo federal y tomarán su ponencia en la Primera Sala.

El artículo 96 de la Constitución establece que la terna enviada por el presidente de la República debe ser aprobada por al menos dos terceras partes del Senado, instancia que, luego de las comparecencias de las candidatas, tendrá un plazo de 30 días para votar y designar a la nueva ministra.

Si el Senado rechaza la terna, el presidente deberá enviar otra, y si tampoco se aprueba ningún candidato de la segunda propuesta, el mandatario federal podrá designar directamente a quien será el próximo ministro o ministra de la Corte.