CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).– En los últimos seis años la Ciudad de México ha experimentado un incremento en el uso de motocicletas para fines personales y comerciales disparando los accidentes viales. 

De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la capital del país, los decesos en incidentes con motociclistas involucrados se dispararon 124.79%, de 2019 a 2022, mientras que el número de lesionados también aumentó 114.02% en el mismo lapso.

El 21 de abril de 2022 un joven de aproximadamente 25 años perdió el control de su motocicleta al tomar una curva en exceso de velocidad y cayó de un puente vehicular en la colonia Arenal Segunda Sección, en la alcaldía Venustiano Carranza. El conductor murió y su copiloto resultó gravemente herido. El 9 de octubre de ese año Polo y Ángel, de 26 y 22 años, respectivamente, impactaron la motocicleta que conducían a exceso de velocidad y sin casco contra un árbol, en la colonia San Juan de Aragón, Sexta Sección, en la alcaldía Gustavo A. Madero. Ambos murieron. 

Semanas después, el 16 de diciembre un repartidor de tortillas murió atropellado por una unidad de Metrobús. El hombre de aproximadamente 45 años, que buscaba cruzar un camellón, conducía su motocicleta sobre el carril confinado de avenida Insurgentes y el cruce con la calle Thomas Alva Edison, en la alcaldía Cuauhtémoc.

Esos casos son parte de los más de 17 mil 800 accidentes viales ocasionados o en los que motociclistas se vieron involucrados durante 2022, año en que, de acuerdo con la SSC, la capital del país ha registrado más fallecimientos y lesionados en lo que va del sexenio. 

En años previos también se mantuvo la incidencia de casos donde la constante fue el no acatar el reglamento de tránsito, que prohíbe a motociclistas circular por carriles confinados para el transporte público de pasajeros, hacer maniobras riesgosas o temerarias, cortes de circulación o cambios abruptos de carril que pongan en riesgo su integridad y la de terceros, y no utilizar casco protector diseñado exclusivamente para la conducción de motocicleta, entre otras medidas de seguridad. 

Un caso más: Eduardo Tadeo salió el domingo 5 de diciembre de 2021 a repartir comida a bordo de su motocicleta. Trabajaba para la empresa Didi y a la altura de Circuito Interior y Eje 1 Norte, en la alcaldía Miguel Hidalgo, intentó ganar tiempo y cruzó un semáforo pese a tener el alto. Un camión de transporte público de la empresa COPATTSA, en contraflujo, no alcanzó a verlo y lo embistió, por lo que el joven de 27 años murió al instante. 

Él fue una de las 179 víctimas registradas en ese año por la institución, que también contabilizó más de 14 mil lesionados en incidentes que incluyen atropellamientos, choques, derrapes, volcaduras y caídas de pasajeros. En 2020 la SSC registró 151 fallecidos y nueve mil 715 lesionados, mientras que en 2019 hubo 117 personas muertos y nueve mil 379 lesionados. 

Radiografía de la imprudencia

De los cinco tipos de accidentes que la Secretaría de Seguridad Ciudadana monitorea, los choques representan el que más fallecidos y heridos causa, con un total de 439 decesos y 39 mil 588 lesionados hasta agosto de este 2023. En segundo lugar se encuentran los derrapes, con 367 muertes y 22 mil 539 lesionados, mientras que los atropellamientos han ocasionado la muerte de 48 personas y lesiones en tres mil 611 en el mismo lapso. 

Los incidentes menos mortales son las caídas de pasajeros, con dos fallecidos y 42 lesionados, y las volcaduras, con sólo cinco lesionados. En total, de 2019 al tercer trimestre de 2023 se han registrado 856 muertes y 65 mil 785 lesionados en esos incidentes.

Durante lo que va del presente sexenio se han registrado 117 muertes, cuatro mil 291 choques, tres mil 656 derrapes y 599 atropellamientos en 2019; 151 decesos, cinco mil 152 choques, tres mil 357 derrapes y 401 atropellamientos en 2020; 179 fallecimientos, siete mil 745 choques, cuatro mil 428 derrapes y 562 choques en 2021; 263 decesos, 11 mil 36 choques, cinco mil 786 derrapes y 988 atropellamientos en 2022, y 146 muertes, seis mil 980 choques, tres mil 596 derrapes y 662 atropellamientos hasta agosto de 2023. 

Sin homologar bases de datos

De acuerdo con la Secretaría de Movilidad (Semovi) capitalina, esta institución también genera reportes de hechos de tránsito en colaboración con la Fiscalía General de Justicia local, el Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicación y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C5), y la propia Secretaría de Seguridad Ciudadana. Sin embargo, las cifras de fallecidos y lesionados en su apartado de motociclistas no está homologada y presenta una variación respecto de los datos proporcionados por la Secretaría de Seguridad.

La Semovi ha registrado 650 muertos y 50 mil 424 heridos hasta junio de 2023, siendo que aún no presentan el informe correspondiente al tercer trimestre de este año.

Al respecto, el experto en ciencia de datos y manejo y análisis de bases de datos Alejandro Caballero Guzmán aclara que esta disparidad puede dificultar la planificación, estrategia y asignación eficiente de recursos para abordar problemas específicos de seguridad vial, ya que las autoridades pueden tener dificultades para identificar áreas críticas.

También resalta que la falta de homologación de datos complica la evaluación de la efectividad de las políticas públicas y programas implementados para mejorar la seguridad vial y la movilidad en la capital, ya que la falta de consistencia puede hacer que sea difícil determinar qué medidas están funcionando y cuáles necesitan cambios de estrategia.

En cuanto al trabajo de analistas y especialistas en temas de movilidad y seguridad vial, Caballero Guzmán subraya que la inconsistencia en los datos limita la capacidad de los expertos para identificar patrones y factores comunes.

Problema multifactorial

Para Juan Manuel Berdeja, especialista en movilidad y urbanismo, el aumento de accidentes ocasionados por motociclistas está directamente relacionado con la facilidad para adquirir este tipo de vehículos en México, pues afirma que es más barato para un gran porcentaje de la población acceder a una motoneta o motocicleta de bajo cilindraje que comprar un automóvil. 

En ese contexto la responsabilidad de evitar el aumento de incidentes viales, explica, no solamente recae en las secretarías de movilidad o seguridad pública, sino que debe ser abordado de manera interinstitucional incluso por los organismos encargados de regular precios e impuestos en la venta de estos vehículos.

En este sentido, Berdeja advierte que aún continuará la tendencia al alza de accidentes viales en la Ciudad de México hasta que se gestione un esfuerzo integral e interinstitucional local y de la Federación, pues un gran porcentaje de los accidentes con motociclistas involucrados se presentan en vialidades secundarias.

En cuanto a la implementación y eficiencia de las políticas públicas, señala que, aunque la mayoría son reactivas o preventivas –como las adecuaciones recientes al nuevo reglamento de tránsito capitalino o los operativos y dispositivos de revisión de motociclistas–, y no atacan de manera estructural el problema, son un buen referente de lo que se debería implementar en otras ciudades que carecen de estrategias de regulación y control de este tipo de vehículos.

Juan Manuel Berdeja subraya que el aumento de lesionados y fallecidos por accidentes de motocicleta muestra que la sociedad tiene una cultura vial deficiente, pero también instituciones que muchas veces no cuentan con recursos o personal suficiente para atender la problemática, por lo que es necesario y urgente establecer una agenda global en la que participen todos los niveles de gobierno y se comprometan a trabajar coordinadamente para salvar vidas.

Un ejemplo de la magnitud del problema se expone en el siguiente video, publicado el 24 de septiembre último por la usuaria de X-Twitter @TzindiaA, quien ese día alertó que dos niños tripulaban una motocicleta a toda velocidad por calles de Tláhuac. En la imagen también aparece una pareja en otra motocicleta; ninguno de los dos usa casco.