CIUDAD DE MÉXICO (apro).-El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, no hay una agenda definida y si sale el tema del T-MEC, respecto a la política energética del gobierno, lo abordarán. 

“A la 1:30 tenemos reunión, es una plática independiente de la agenda que se va a llevar a cabo en esa reunión que se hace periódicamente, de alto nivel, donde participan secretarios de economía de los países de Estados Unidos y México y se ven varios temas y si hay oportunidad fuera de ese programa que tiene su agenda propia, vamos a platicar sobre temas. No hay una agenda definida para que yo trate ni él, pero es atender asuntos que importan a los dos países”, afirmó.

En torno al tratado comercial, insistió en que se ha tenido una “buena respuesta” del presidente estadunidense Joe Biden. “No hay dificultad, no hay problemas. Ya lo expliqué: en una ocasión los atendimos 15 días. Abrí la agenda y personalmente atendí creo que a 18 empresas estadounidenses y de las 18 llegamos a acuerdos con casi todas y lo vamos a seguir haciendo porque es nuestro trabajo”. 

Agregó que “si hay algo que les impida invertir y que tengan razón porque son asuntos que se dan en el marco de la legalidad, tenemos que ayudar. Lo estamos haciendo. Ah pero sí se trata de que una empresa estadounidense, como ha sucedido se le agarra con contrabando de combustible ni modo que porque es estadounidense no va a haber sanción”. 

También reiteró que la carta que le envió Biden fue con la intención de que haya buena relación y respeto a las dos soberanías, así como una política de buena vecindad y no hemos tenido problemas. “Nuestros adversarios se frotan las manos, ya llevan cuatro años y se van a desgastar. Quisieran que nos peleáramos, apostaron a eso con el presidente Trump y terminó bien para los dos países” 

“Ya no es el tiempo de antes qué podían gobiernos extranjeros tomar represalias, incluso en el extremo invadirnos, eso ya no. México es un país independiente, libre, soberano y ha costado mucho, por eso celebramos con mucho orgullo nuestra independencia”, añadió. 

El presidente insistió en que “nos conviene mucho las relaciones, hay mucha amistad entre los pueblos”, por los 40 millones de mexicanos que viven y trabajan en Estados Unidos.

“Hay Lugares en Estados Unidos donde no se necesita hablar inglés (…) No podemos pelearnos, tenemos que buscar que sean buenas las relaciones y es responsabilidad de los gobiernos”.