CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- “Sus vidas no serán arrebatadas en vano porque aquí estaremos siempre luchando por hacer memoria, por saber la verdad y exigiendo justicia”, aseguró Patricia Espinosa, hermana del fotoperiodista Rubén Espinosa, frente al edificio donde hace 7 años ocurrió el crimen conocido como el Caso Narvarte.

Como cada año, este 31 de julio, familiares y amigos de la trabajadora del hogar Alejandra Negrete, la maquillista Yesenia Quiroz, la modelo Mile Martín, la activista Nadia Vera y el fotoperiodista y colaborador de Proceso, Rubén Espinosa, encabezaron el festival “Arte para no Olvidarte”, un acto de memoria y de protesta, pues el multifeminicidio y homicidio ocurridos aquella tarde del 2015 no han sido resueltos.

Afuera del edificio marcado con el número 1909 de la calle Luz Saviñón, los deudos protagonizaron un ritual prehispánico en memoria de sus hijos y sus madres torturados y asesinados en el departamento 401. También colocaron las placas con los nombres de Nadia y Mile que fueron retirados del memorial que pusieron hace un año en un gran árbol a la entrada del inmueble. 

Tras encender veladoras y ponerlas en el nombre de cada una de las víctimas, se abrazaron unos a otros y, luego en un círculo para compartir el dolor por la ausencia de sus seres queridos y la rabia por la falta de verdad y justicia.

Y es que, a decir de los propios familiares, después de 7 años la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) no ha profundizado en todas las líneas de investigación para determinar el verdadero móvil del crimen ni ha indagado más sobre otros dos cómplices. Ese dato se lo dieron a conocer ellos mismos el 30 de marzo pasado, aunque la evidencia estaba en los videos que la autoridad tuvo desde el inicio de la investigación. 

“Este es un homenaje que les hacemos bailando, cantando y sonriendo y con la exigencia de verdad y justicia”, dijeron los organizadores, entre ellos, integrantes de Artículo 19, organismo que representa la defensa jurídica de la familia de Rubén Espinosa.

Dolor y recuerdo

El festival comenzó pasadas las 11 de la mañana. Entre cada presentación musical, que incluyó rap y reggae tomaron la palabra los familiares de las víctimas. 

La primera fue Indira Alfaro, madre de Yesenia Quiroz, quien, con voz entrecortada, dijo: “Yesenia, hija hermosa, mi niña. Tenía 18 años, apenas empezaba a vivir y tenía muchos sueños… Pensabas que este lugar era seguro, pero yo sé que fuiste feliz y libre… Dicen que con los años se olvida, pero al contrario, ¡duele más!”.

Siguió Mirta Pérez, madre de Nadia Vera, quien expresó su sentimiento como mejor lo sabe hacer, con poemas de su autoría: “5 pájaros cantan en la rama del árbol sobre la avenida de la gran ciudad, mientras 5 personas son asesinadas en un departamento del edificio sobre la avenida de la gran ciudad”.

Gabriela Mejía, hija de Alejandra Negrete, reflexionó: “Querida mamá, a veces soy egoísta y me pregunto ¿por qué tuviste que irte? ¿por qué tuviste que apartarte de mi lado cuando más te necesitaba?... Sé que querías quedarte siempre junto a mí”.

Los deudos explicaron que la familia de Mile, aunque no pudo viajar de Colombia a México, refrendaba el acto de memoria y exigencia de justicia.

El corrido de Rubén  

De entre los cantautores que participaron en el festival, llamó la atención José Leonardo, quien adaptó un corrido y le cambió el nombre por el de Rubén Espinosa. Así se entonó:

“Con un cinismo que espanta y, al mismo tiempo, avergüenza, aún siguen celebrando el día de la libertad de prensa, agregando homicidios, la dignidad y la ofensa. 

“Hay libertad de expresión, pero para pa’desinformar, te asesinan por la espalda, si escribes con la verdad.

“Adiós querido Rubén, tu ejemplo me hizo cantar. Ojalá que sus compañeros nos honren con su honestidad!”,      

Luego, Alma Espinosa, hermana del fotoperiodista, dijo para él y para las cuatro mujeres víctimas: “Rubén sigue viviendo entre nosotros y no nos abandonará hasta obtener la justicia que necesita y que, en vida, él tanto buscó para sus compañeros asesinados. Aquí, a 7 años, seguimos pidiendo para que llegue la justicia para Yesenia, Nadia, Alejandra, Mile y Rubén. Hermano, te agradecemos todo lo que nos diste. Nos haces mucha falta. Siempre te amaremos y te llevamos en el corazón”.

Como cierre del festival, los asistentes hicieron un círculo alrededor de los familiares de las víctimas del caso Narvarte y gritaron en una sola voz: “¡Ni perdón ni olvido! ¡Castigo a los asesinos!”.