CUDAD DE MÉXICO (apro).- Berenice “N” se ganó el mote de “Viuda negra” luego de que fuera acusada de asesinar a su esposo, el empresario Jacobo Quesada, y los dos hijos de él, el 5 de abril de 2019, en la Ciudad de México.

Desde ese año era buscada por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) y este miércoles fue capturada en el puerto de Acapulco por elementos de la Fiscalía de Guerrero.

La dependencia estatal informó que a “través de investigación aplicada”, se logró la detención y vinculación a proceso de Berenice “N” por el delito de homicidio doloso por proyectil de arma de fuego, en atención a la orden girada por la FGJCDMX el 20 de diciembre de 2019.

“En conocidas calles de la ciudad y puerto de Acapulco, se ejecutó la orden de aprehensión, correspondiendo con labores de búsqueda, localización y captura, como parte de los convenios de colaboración con otras entidades”, informó la Fiscalía guerrerense.

De acuerdo con el periodista Carlos Jiménez, Berenice turisteaba en un hotel de Acapulco cuando fue reconocida por una persona que sigue la cuenta del reportero Twitter, la grabó y la denunció.

La mujer, era empleada doméstica de Jacobo Quesada, luego tuvieron una relación sentimental y se casaron. Pasado un tiempo, Jacobo Quesada descubrió a Berenice Alanís siéndole infiel con su propio hijo y un empleado.

El empresario Jacobo Quesada y sus dos hijos, Jacobo y Patricia, fueron asesinados el 5 de abril de 2019 en un gimnasio de la Colonia Lindavista luego de que hombres armados ingresaran al lugar y les dispararan.

Berenice fue detenida días después, sin embargo, un juez de oralidad determinó que el Ministerio Público la retuvo de manera incorrecta, que la detención fue ilegal y fue puesta en libertad.

El MP que ordenó la detención acusó a Berenice del crimen por una supuesta venganza, que habría sido motivada luego de que su esposo la sacara de su testamento tras descubrir que le había sido infiel.