CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores de Estado (ISSSTE) lo dejaron como un cascarón y sus funcionarios actuaban como mafias.

“Para hacer los análisis existen contratos, están subrogados todos los servicios, los bancos de sangre, todo privatizado. Y detrás, quienes fueron funcionarios del ISSSTE, finísimas personas, mafias”, aseguró.

Los contratos con empresas privadas están por vencerse y una vez que eso suceda, muchos de los servicios estarán de nuevo a cargo del gobierno federal, señaló el mandatario.

“Se están venciendo los contratos y vamos, es como nacionalizar de nuevo, regresar a lo público, lo que ya habían entregado a particulares, a políticos corruptos, por influyentismo”, expuso.

Dijo que esta realidad se debió a las malas prácticas que se tenían también por parte del gobierno, “hasta se le aplaudía a los corruptos, robaban y ni siquiera perdían su respetabilidad, y se veía como algo normal”.

El presidente apuntó que en las élites existe la mentalidad de hacer negocios, “léase transas, al amparo del poder público; cómo conseguimos un contrato, cómo vendemos medicina, tres, cuatro, cinco, 10 veces más de su valor real”.

“Así estaba todo, podrido”, dijo el presidente y exhibió que los servicios del ISSSTE están “de pena; avergüenzan. Y esto llevó también a que mucho personal, no todos, afortunadamente, se deshumanizaran, porque si están viendo el atraco, el desorden, el robo de directivos, de líderes sindicales, pues ellos también”.

El presidente expuso un ejemplo de lo que se vive diario en las unidades del ISSSTE: “Una paciente que ya deben de atender porque necesita dar a luz. ‘No, todavía no, váyase y ya luego regresa’. A esos extremos. Y de repente sale un doctor, una doctora sensible, ‘no, hay que atenderla ya, urge’. Y nace la criatura de milagro”.