GUANAJUATO, Gto. (apro).– Raúl Julio Escobar Poblete, alias “Comandante Emilio”, exintegrante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez y quien cumple una sentencia de 60 años por secuestro en México, fue extraditado la tarde de este miércoles a Chile de manera temporal, para enfrentar un juicio por el asesinato del senador Jaime Guzmán Errázuriz, cometido en abril de 1991 en ese país.

En julio pasado, un tribunal federal en materia penal negó un amparo interpuesto por abogados del “Comandante Emilio” en contra de la extradición, en el que se alegaba la calidad de luchador social de Escobar en contra de la dictadura militar encabezada por Augusto Pinochet y, por ello, ser un perseguido político del gobierno chileno.

La extradición de Escobar, quien vivió 20 años en San Miguel de Allende bajo la identidad de Ramón Alberto Guerra Valencia, fue difundida inicialmente por autoridades chilenas este miércoles y reproducida con gran resonancia en los medios de comunicación de ese país.

Según la información conocida –de la cual las autoridades mexicanas no han dado detalles– Escobar fue sacado del Centro de Reinserción Social Federal de Ocampo la mañana de este miércoles, y entregado a personal de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) para abordar un vuelo con destino a ese país, a donde se prevé su arribo por la noche del miércoles.

Escobar Poblete sería puesto a disposición de un ministro de la Corte de Apelaciones de Chile para ser interrogado y sometido a juicio, después de lo cual tendría que ser devuelto a México para continuar purgando su sentencia por secuestro, delito del que fue acusado por la Fiscalía de Guanajuato a mediados de 2017.

Sin embargo, la abogada Gloria Méndez, del Centro de Derechos Humanos “Zeferino Ladrillero” –organización civil que lleva la defensa del chileno contra la sentencia por secuestro– informó a Apro que mientras las autoridades ya daban información a medios chilenos sobre la extradición, en México Escobar Poblete fue apenas notificado en la mañana y que sus defensores no han sido informados formalmente del proceso.

Su defensa denuncia una extradición irregular

La defensa del exguerrillero chileno alegó que la extradición no debió proceder, puesto que desde hace un mes se interpuso un amparo directo contra la sentencia por secuestro que le impuso el Poder Judicial de Guanajuato, misma que fue ratificada en una segunda instancia por esa misma autoridad.

El amparo fue turnado al Tribunal colegiado en materia penal del décimo sexto circuito de Guanajuato, por lo que esto debió detener el proceso de extradición de Escobar, pues es “un acto jurídico por el que, cuando hay una causa pendiente contra una persona que está siendo reclamada por otro país, debe primero resolverse antes de que proceda la extradición; la sentencia injusta que estaba cumpliendo en México fue interrumpida por este amparo directo”, dijo Gloria Méndez.

La abogada contó que recibió una llamada de Raúl Julio desde el Cefereso de Ocampo alrededor de las 10 de la mañana de este miércoles, en la que le dijo que lo estaban cambiando a otra área del penal e ignoraba por qué.

“A las 12:40 (Raúl) llama otra vez de forma extraordinaria para avisar que a las 2 de la tarde se le trasladaría a Chile, que en ese momento se le notifica. Y nos damos cuenta de que hay medios chilenos que ya están dando la noticia, les notifican antes que a la persona y a sus abogados, eso es completamente violatorio de sus derechos”, reclamó.

La abogada del centro “Zeferino Ladrillero” dijo que mantenían “una expectativa distinta” con el actual gobierno federal –el acuerdo de extradición fue aprobado al final del sexenio de Enrique Peña Nieto–, por tratarse “de un gobierno democrático; teníamos la expectativa de que se respetaran los derechos humanos y se salvaguardara la integridad física de Emilio, porque es bien conocido el escenario de hoy en Chile, la tortura a presas y presos mapuche y presos del Frente Patriótico”.

En tanto, en Chile se difundió ampliamente el próximo arribo de Escobar Poblete, acusado junto con Ricardo “El Negro” Palma Salamanca del asesinato del senador Jaime Guzmán, fundador de la Unión Demócrata Independiente y hombre cercano al general Augusto Pinochet.

Ricardo Palma se ocultó en San Miguel de Allende junto con Escobar y, cuando éste fue capturado y acusado de encabezar una banda de secuestradores que mantenía encerrada a una ciudadana franco-estadunidense, huyó y obtuvo asilo político del gobierno de Francia.