CIUDAD DE MÉXICO (apro).- “No es mi fuerte la venganza”, respondió el presidente Andrés Manuel López Obrador al exsecretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, quien afirmó que la vinculación a proceso en su contra por el delito de enriquecimiento ilícito es “una persecución política”.

“Nosotros no perseguimos a nadie por razones políticas. Si hay un asunto judicial pues tiene que ver con la Fiscalía y es cosa de aclararlo: el que nada debe, nada teme”, expresó el mandatario en la conferencia matutina realizada en el estado de Tabasco.

Al respecto, el titular del Ejecutivo federal dijo que Guajardo Villarreal no debe de preocuparse, argumentando lo siguiente:

“Si no tiene nada ilegal, si él es una gente honesta ¿qué se puede preocupar?”, señaló AMLO y remató: 

“Aquí hay dos cosas, una es la acusación judicial que esa se atiende y la otra es la conciencia de cada quien, lo más importante es la tranquilidad de conciencia. Si él tiene tranquila su conciencia, pues lo demás es lo de menos”, sentenció el tabasqueño.

Luego, dijo que la instrucción que ha dado a sus colaboradores es que si tienen indicios de un presunto acto de corrupción, procedan y canalicen las denuncias ante las instancias correspondientes para deslindar responsabilidades.

“El presidente no puede ser rehén de nadie”, aseguró el tabasqueño y dijo que por estos casos, sus adversarios están muy enojados.