CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Diego Fernández de Cevallos irrumpió en las redes sociales, a sus 80 años, para cortejar a los jóvenes, pero uno de ellos, el tabasqueño Manuel Pedrero, le recriminó destruir la democracia, venderse a Carlos Salinas y desmentir que su nombre “represente dignidad”.

“No creas que los jóvenes somos tontos, pues los viejos te conocen y nosotros también, y no habrá ningún lugar, ni uno, en que el nombre de Diego Fernández de Cevallos represente dignidad”, le dice Pedrero, de 18 años de edad, al candidato presidencial del Partido Acción Nacional (PAN) en 1994.

En un video en respuesta al que difundió Fernández de Cevallos el lunes 1, Pedrero, estudiante de Ciencia Política, da la bienvenida a las redes sociales y le aclara: “He respondido a tu convocatoria a los jóvenes. Te envío este mensaje que hice en un video para que sepas desde ya que nunca más engañarás ni engañarán a los jóvenes”.

El joven tabasqueño, del municipio de Comalcalco, alude a la entrevista de Fernández de Cevallos con “Los Periodistas”, Alejandro Páez Varela y Álvaro Delgado, para responderle.

“La entrevista que le ofreciste a Los Periodistas, excelentes periodistas Álvaro Delgado y Alejandro Páez Varela en La Octava, mencionaste que tu presencia en las redes sociales era para ayudar a México. Sinceramente no entiendo cómo es que tu presencia en los medios digitales va a ayudar a México, cuando tu presencia física en México destruyó elementos clave como su democracia”.

Y añade: “Las nuevas generaciones sabemos quién eres: un hombre que vendió su nombre, su prestigio y su fuerza electoral a Carlos Salinas de Gortari en la elección de 1994, un hombre que siempre perteneció a la mafia del poder”.

El joven hace alusión a la coalición de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática (PRD) con el PAN, que considera “la confusión más aberrante en la historia de las ideologías”.

Y llama la atención que en este año electoral el panista vuelva “del anonimato y del silencio”, lo cual es positivo: “Pero no te confundas por ningún momento en que nosotros los jóvenes somos tontos, pues los viejos ya te conocen, nosotros también, y no habrá ningún lugar, ni uno, en que el nombre de Diego Fernández de Cevallos represente dignidad”.