Narcotráfico
Entre huertos de café y plátano, hallado un plantío de hoja de coca y narcolaboratorio, en Guerrero
El hallazgo del sembradío y centro de producción de cocaína se registró en las inmediaciones del poblado de El Porvenir, ubicado a una hora y media de la cabecera municipal de Atoyac de Álvarez en la región de la Costa Grande del estado de Guerrero, donde nació el guerrillero Lucio Cabañas.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El martes 9 de febrero, soldados del Ejército descubrieron en la sierra del estado de Guerrero, en la franja del Pacífico mexicano, un extenso plantío de hoja de coca –no menos de cuatro hectáreas--, así como un narcolaboratorio para procesar el alcaloide.
Aunque se trata del segundo hallazgo del cultivo de esta planta en el país --el primero fue en Chiapas hace seis años--, el hecho advierte un cambio en la geografía del narco en el continente americano donde los carteles mexicanos estarían asumiendo el control de la producción y rutas de trasiego de cocaína hacia los Estados Unidos, desplazando a las organizaciones afincadas en países como Colombia, Perú y Bolivia donde la hoja de coca es parte de la cultura andina.
El hallazgo del sembradío y centro de producción de cocaína se registró en las inmediaciones del poblado de El Porvenir, ubicado a una hora y media de la cabecera municipal de Atoyac de Álvarez en la región de la Costa Grande del estado de Guerrero, lugar donde nació el profesor guerrillero Lucio Cabañas Barrientos.
En esa franja cafetalera que conecta la región Centro de Guerrero con el Pacífico mexicano, se producían al menos 28 kilos del alcaloide que tiene un precio en el mercado de 250 mil pesos el kilo y su precio aumenta hasta lo triple en los Estados Unidos.
El hallazgo del laboratorio para elaborar cocaína es el más importante en México por la elevada capacidad de producción, así como el primero en Guerrero y el segundo en el país, pues en 2014 fue localizado un plantío con apenas mil 639 plantas de hoja de coca en el poblado de Tuxtla El Chico, Chiapas, informaron mandos del 109 batallón de Infantería con sede en el Ticuí, municipio de Atoyac.
Por su parte, informes del gobierno de Héctor Astudillo Flores indican que el grupo delictivo de Los Granados que dirige Salvador El Chava Granados, es la banda que controla la producción de enervantes y el trasiego de cocaína en los municipios de Tecpan de Galeana y Atoyac de Álvarez, ambos ubicados en la región de la Costa Grande, posicionados estratégicamente frente al Pacífico mexicano y a una hora del puerto de Acapulco.
Precisamente, en el municipio de Tecpan de Galeana, el gobierno astudillista construye, a través del director de la Comisión de Infraestructura Carretera y Aeroportuaria del estado de Guerrero (CICAEG), Javier Taja Ramírez, una aeropista en esa zona controlada por Los Granados y que tiene un costo de cinco millones de pesos procedentes de recursos federales, indican reportes oficiales.
El campo de Coca en Guerrero
El lunes por la mañana, un grupo de reporteros y soldados a cargo del Teniente Coronel Enrique Benitez Campo, comandante del 109 batallón de Infantería con sede en el poblado de El Ticuí realizaron un recorrido en la sierra de Atoyac donde fue localizado el narcolaboratorio y los cultivos de hoja de coca.
El recorrido de la cabecera municipal a los ejidos de El Porvenir, El Limón y Río Santiago es apenas de hora y media sobre caminos sinuosos y de vegetación abundante.
Al respecto, el mando castrense indicó que se desconoce desde cuando están procesando cocaína en la parte serrana de Atoyac pero advirtió que el uso del ácido clorhídrico “es controlado” y la venta del químico requiere permisos federales.
De acuerdo a las crónicas periodísticas, los plantíos de hoja de cocaína están en terrenos planos donde abundan pequeñas huertas de café y plátano, productos que se dan a una altura de mil a 900 metros de altitud y por la vegetación se considera como selva tropical, explicaron los militares.
La diferencia entre los plantíos de hoja de Coca y de amapola, es que el opio es recolectado en zonas más altas y frías de la sierra de Guerrero donde precisamente el Ejército y caciques locales junto a narcotraficantes de Sinaloa, llevaron la semilla del opiaceo en la década de los setentas como estrategia contra insurgente y de esta forma convirtieron la entidad en la principal productora de heroína en el país.
Ahora, el presidente Andrés Manuel López Obrador reveló públicamente la semana pasada, el hallazgo de un centro de procesamiento de Cocaína en la sierra de Atoyac de Álvarez en Guerrero, una entidad colapsada por la delincuencia, donde el narco lo controla todo previo al proceso electoral donde se renovará la gubernatura, así como 81 ayuntamientos y el Congreso local.