CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó haber amenazado al gobierno estadunidense con expulsar de México a los agentes de la agencia antidrogas de ese país (la DEA), si no se retiraban los cargos al general Salvador Cienfuegos, el exsecretario de la Defensa Nacional.

El diario, The New York Times informó que ese habría sido el motivo por el que el gobierno de aquel país aceptó la presión mexicana sobre el caso de quien fue el alto mando militar durante el sexenio pasado:

“Ahora están diciendo que amenazamos. No amenazamos a nadie. Lo único que hicimos fue, por la vía diplomática, expresar nuestra inconformidad y se entendió muy bien y se resolvió en esta prima instancia”, dijo.

El general en retiro fue detenido a mediados de octubre en Los Ángeles, California, acusado de diversos delitos relacionados narcotráfico y lavado de dinero; México expresó días después su descontento por la forma en que se condujo la investigación y el pasado martes la fiscalía estadunidense retiró los cargos, tras un acuerdo que fue admitido por la jueza del caso. Ayer, Cienfuegos llegó a México y quedó en libertad.

En su conferencia de prensa matutina, el presidente López Obrador atajó la publicación del diario neoyorkino:

“Se equivocaron porque no amenazamos nosotros de expulsión a los agentes, dijimos: queremos que se nos informe y se respeten los acuerdos de cooperación, y esos acuerdos tienen sustento. El sustento es la confianza”.

“Confianza” es uno de los vocablos más reiterados tanto por el canciller Marcelo Ebrard como por el presidente López Obrador, desde que trascendió el inusual acuerdo entre los gobiernos de las dos naciones. Inclusive, a nivel doméstico, el mandatario mexicano hizo un llamado concreto a confiar en la atención que se le da a los “casos heredados de injusticia”.

Además, pidió que el manejo que ha dado al caso, no se interprete como una protección o aplicación de justicia selectiva --dos críticas que se han expuesto ampliamente en el debate nacional--, pues dijo, en su gobierno, se “aplica la ley por parejo”.

El acuerdo, una reafirmación de la soberanía

El acuerdo sobre el caso con las autoridades de Estados Unidos, que resultó en la repatriación del militar ayer, fue calificado hoy por el mandatario como una reafirmación de soberanía, independencia y libertad.

No obstante, consideró que es una “gran injusticia juzgar a inocentes y eso la autoridad competente lo tendrá que aclarar”.

La autoridad competente es la Fiscalía General de la República (FGR), para la que, junto con su titular, el presidente López Obrador expresó una vez más, tener confianza y añadió más consideraciones sobre la soberanía:

“No se puede permitir que agencias extranjeras juzguen a mexicanos si no hay pruebas”.

El presidente López Obrador dio por cerrado el asunto Cienfuegos esta mañana, al menos en lo que respecta a sus expresiones públicas, pues anunció que ya no seguirá abordando el asunto, a menos que lo amerite o que haya preguntas que deba responder, declinando la información sobre el caso a la FGR.