CIUDAD DE MÉXICO (apro).- México requiere una respuesta integral contra la diabetes, padecimiento que año con año provoca la muerte de más de 100 mil personas, advirtió la Alianza por la Salud Alimentaria.

En el marco del Día Mundial de la Diabetes, que se conmemora el 14 de noviembre, el organismo recordó que México presenta la mayor incidencia de muertes por esta enfermedad entre los países de gran población en todo el mundo, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud.

La diabetes ha seguido una tendencia ascendente y un rápido aumento en los últimos años en México, pasando de 4.6% en personas mayores de 20 años en 2000, hasta 10.4% en 2018, de acuerdo con las Encuestas Nacionales de Salud y Nutrición (ENSANUT).

En el año 2000 se registraron poco más de 46 mil muertes por diabetes y para 2018 la cifra aumentó a 106 mil 525. En este contexto, el gobierno mexicano declaró la emergencia epidemiológica por diabetes en 2016 y actualmente esta enfermedad es la primera causa de muertes en adultos de 45 a 64 años de edad. 

De acuerdo con las proyecciones de la Federación Internacional de Diabetes, para 2025 habrá 9 millones de diabéticos en México y para el año 2045 el país ocupará el sexto lugar en el mundo con 22.5 millones de casos.

La Alianza por la Salud Alimentaria recordó que esta enfermedad es considerada una emergencia de salud pública por el alto costo que representa para los sistemas de salud y que durante la pandemia de covid-19 se ha observado que las complicaciones de la enfermedad son 87% mayores en personas con diabetes.

Por otra parte, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares tienen una relación directa con el alto consumo de azúcares añadidos, grasa saturada y sal, contenidos en alimentos ultra procesados y bebidas azucaradas, de los cuales, México es el mayor consumidor en Latinoamérica, con una ingesta promedio de 214 kg de comida chatarra y bebidas azucaradas al año por persona.

El organismo consideró que la implementación del nuevo etiquetado frontal en alimentos ultra procesados fue un gran paso para que la población realice elecciones más saludables.

Sin embargo, resaltó que es necesario fortalecer la prohibición de la publicidad de estos productos, la salida de productos no saludables de las escuelas y la creación de una política integral para un sistema alimentario saludable y sustentable con campañas masivas de orientación alimentaria.