KAMPALA, Uganda (AP).- Un niño de 4 años se convirtió en la segunda persona en morir de ébola en Uganda, dijo este sábado la Organización Mundial de la Salud (OMS), en un revés para los funcionarios de salud que esperaban un rápido fin del brote que comenzó a fines de enero.

El niño había sido hospitalizado en el principal centro de referencia de Kampala, la capital del país del este de África, y murió el martes, dijo la oficina de la OMS en Uganda en un breve comunicado.

Ese comunicado decía que la OMS y otros están trabajando para fortalecer la vigilancia y el rastreo de contactos. No hubo más detalles sobre la muerte y los funcionarios de salud locales no hicieron comentarios sobre el caso.

La muerte desmiente las afirmaciones de las autoridades ugandesas de que el brote estaba bajo control, después de que ocho pacientes de ébola fueran dados de alta a principios de febrero. La primera víctima fue un enfermero que murió el día antes de que se declarara el brote, el 30 de enero. Había buscado tratamiento en varios centros de Kampala y en el este de Uganda, donde también visitó a un curandero tradicional para intentar diagnosticar su enfermedad, antes de morir más tarde en Kampala.

El tratamiento exitoso de ocho pacientes que habían estado en contacto con ese hombre, incluidos algunos de sus familiares, había hecho que los funcionarios de salud locales anticiparan el fin del brote, pero todavía están investigando su origen.

El rastreo de contactos es clave para detener la propagación del ébola, y no existen vacunas aprobadas para la cepa de ébola de Sudán que está infectando a personas en Uganda.

Más de 20 mil viajeros son examinados diariamente para detectar el ébola en los diferentes pasos fronterizos de Uganda, según la OMS, que apoya la labor.

La OMS ha dado a Uganda al menos 3 millones de dólares para apoyar su respuesta al ébola, pero ha habido preocupaciones sobre la financiación adecuada a raíz de la decisión de la administración estadounidense de rescindir el 60% de los contratos de ayuda exterior de USAID.

Dithan Kiragga, director ejecutivo de la Fundación Infantil del Baylor College of Medicine, un grupo no gubernamental que apoya la vigilancia del ébola en Uganda, dijo a The Associated Press el viernes que su grupo había dejado de trabajar para apoyar a las autoridades sanitarias locales en la detección de pasajeros que viajaban tras la rescisión de su contrato con USAID.

El contrato de cinco años, firmado en 2022 y con un valor de 27 millones de dólares, empleaba a 85 personas a tiempo completo que estaban empleadas en una variedad de actividades de salud pública, dijo el Dr. Kiragga.

Charles Olaro, director de servicios de salud del Ministerio de Salud de Uganda, dijo que los recortes de la ayuda estadounidense perjudican el trabajo de algunos grupos no gubernamentales que apoyan la respuesta a las enfermedades infecciosas.

“Hay desafíos, pero debemos adaptarnos a la nueva realidad”, dijo el Dr. Olaro, hablando de la pérdida de financiación estadunidense.

El ébola, que se transmite por contacto con fluidos corporales de una persona infectada o materiales contaminados, se manifiesta como una fiebre hemorrágica mortal. Los síntomas incluyen fiebre, vómitos, diarrea, dolor muscular y, en ocasiones, hemorragia interna y externa.

Los científicos sospechan que la primera persona infectada con ébola durante un brote adquirió el virus a través del contacto con un animal infectado o al comer su carne cruda.

El último brote en Uganda, descubierto en septiembre de 2022, mató al menos a 55 personas antes de ser declarado terminado en enero de 2023.

El ébola en Uganda es el último de una serie de brotes de fiebres hemorrágicas virales en la región del este de África. Tanzania declaró un brote de la enfermedad de Marburgo, similar al ébola, en enero y, en diciembre, Ruanda anunció que su propio brote de Marburgo había terminado.

Uganda ha sufrido múltiples brotes de ébola, incluido uno en 2000 que mató a cientos de personas. El brote de ébola de 2014-2016 en África occidental mató a más de 11 mil personas, la mayor cifra de muertes de la enfermedad.

El ébola se descubrió en 1976 en brotes simultáneos en Sudán del Sur y el Congo, donde ocurrió en una aldea cerca del río Ébola, que da nombre a la enfermedad.