Donald Trump
Obispa pide misericordia a Trump con los migrantes y la comunidad LGBTQ+; él le exige una disculpa
"Podrán no ser ciudadanos, o tener la documentación apropiada. Pero la vasta mayoría de los migrantes no son criminales. Ellos pagan impuestos, son buenos vecinos, son fieles miembros de nuestras iglesias, mezquitas, sinagogas y templos", dijo la religiosaCIUDAD DE MÉXICO (apro).- La obispa Mariann Edgar Budde, primera mujer al frente de la Diócesis Episcopal de Washington D.C., llamó a Donald Trump a tener misericordia de las personas de la comunidad LGBTQ+ y de los trabajadores migrantes que carecen de documentación para residir legalmente en Estados Unidos, durante el servicio interreligioso de investidura.
Budde empezó con la plegaria con una referencia a la creencia de Trump de que fue salvado por Dios de un asesinato y señaló:
“Millones han puesto su confianza en usted, y como dijo a la nación ayer, has sentido la mano providencial de un Dios amoroso. En nombre de nuestro Dios, te pido que tengas misericordia de las personas en nuestro país que ahora están asustadas”.
"Hay niños gays, lesbianas y transexuales, y familias demócratas y republicanas e independientes, algunas de las cuales temen por sus vidas", continuó.
“Gente que recoge las cosechas, que limpia nuestras oficinas. Que trabajan en granjas y en empacadoras de carne. Que lavan los platos cuando comemos en restaurantes. Y que trabajan en turnos nocturnos en hospitales".
Mientras la obispa pronunciaba estas palabras, el presidente Trump y el vicepresidente J.D. Vance, ocupaban la primera fila en el recinto, junto con sus respectivas esposas, Melania Trump y Usha Vance.
Cuando la obispa abogó por los migrantes, cierta incomodidad se volvió evidente entre Vance y Usha, quienes intercambiaron miradas. Por su parte, Trump dejó de mirar al frente y empezó a mover la cabeza hacia los lados.
Bishop Mariann Edgar Budde pleads to President Donald Trump to have mercy amid LGBTQ+ and immigration policies.pic.twitter.com/rNmpjmnd50 — Pop Crave (@PopCrave) January 21, 2025
"Podrán no ser ciudadanos, o tener la documentación apropiada. Pero la vasta mayoría de los migrantes no son criminales. Ellos pagan impuestos, son buenos vecinos, son fieles miembros de nuestras iglesias, mezquitas, sinagogas y templos", dijo la religiosa, quien está al frente de esa catedral de la Iglesia Episcopal desde 2011.
"Le pido que tenga clemencia con aquellos en nuestras comunidades cuyos niños temen que sus padres sean llevados lejos. Y que ayude a los que huyen de zonas de guerra y persecución en sus propias tierras a encontrar compasión y acogida aquí".
En sus primeros dos días de gobierno, Trump ya emitió varias órdenes ejecutivas que revocan los derechos de las personas transexuales y que endurecen las políticas de inmigración, por ejemplo, tras la investidura canceló de forma inmediata la aplicación CBP One para los migrantes que solicitan asilo, así como todas las citas ya agendadas previamente.
“Nuestro Dios nos enseña que debemos ser misericordiosos con el extraño, porque todos fuimos alguna vez extraños en esta tierra” señaló la obispa, mirando frente a frente al presidente.
“Que Dios nos dé el coraje y la fuerza para honrar la dignidad de cada ser humano, para decir la verdad con amor y caminar humildemente lado a lado y con nuestro dios por el bien de todas las personas en esta nación y en el mundo”, concluyó Budde.
La respuesta de Donald Trump
Cuando regresó a la Casa Blanca, Trump fue cuestionado sobre el sermón.
“No fue muy emocionante, ¿verdad?”, respondió el presidente mientras caminaba con su equipo hacia el Despacho Oval. “No creo que haya sido un buen servicio. Podrían haberlo hecho mucho mejor”.
Más tarde, en una publicación que hizo en su red social, Truth Social, el republicano criticó a la “supuesta obispa” como una “odiadora de Trump de línea dura de la izquierda radical”.
"Metió a su iglesia en el mundo de la política de una manera muy descortés. Fue desagradable en el tono y no fue convincente, ni inteligente", declaró Trump y añadió que Budde no mencionó que algunos migrantes han llegado a Estados Unidos y han matado a gente.
“Aparte de sus declaraciones inapropiadas, el servicio fue muy aburrido y poco inspirador. ¡No es muy buena en su trabajo!”, señaló el presidente. “¡Ella y su iglesia le deben una disculpa al público!”
El servicio interreligioso celebrado en la Catedral Nacional de Washington se centró principalmente en la unidad nacional. Trump y el vicepresidente JD Vance asistieron con sus familias, así como con el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, y el nominado a secretario de Defensa, Pete Hegseth.
Más de una decena de líderes religiosos hablaron durante el servicio interreligioso, incluidos representantes de las religiones judía, musulmana, budista e hindú. Una ausencia notable entre el clero invitado, con roles de oradores, fueron los evangélicos conservadores, quienes están entre los más fuertes partidarios de Trump. No obstante, algunos de estos estaban sentados entre el público.
La Catedral Nacional de Washington ha albergado 10 servicios oficiales interreligiosos de investidura para presidentes; la tradición se remonta a 1933. Los sermones en los servicios de investidura a menudo han sido dados por ministros alineados con el gobierno entrante. Sin embargo, Budde, quien dio el sermón de este año, se ha unido a otros líderes de la catedral en criticar previamente a Trump, reprendiendo su “retórica racializada” y culpándolo por incitar a la violencia el 6 de enero de 2021.