Argentina
Justicia argentina procesa a religiosos del Opus Dei por trata de personas
Seis religiosos de máxima jerarquía de la organización estarían involucrados en someter a 44 víctimas durante 43 años.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Por delitos de trata de personas la justicia argentina inició un proceso judicial en contra de jerarcas de la organización religiosa Opus Dei que, junto con la Prelatura de Santa Cruz, habrían reclutado con engaños a 44 mujeres pobres, cuando era adolescentes.
De acuerdo a revelaciones del portal elDiario.es al menos “seis religiosos de la máxima jerarquía de la organización” estarían involucrados en someter a las víctimas, durante 43 años.
La investigación periodística a cargo de Paula Bistagnino fechada en Buenos Aires, Argentina, explica que la indagatoria contra el Opus Dei inició en septiembre de 2022 por la Procuraduría contra la Trata de Personas de Argentina (Protex), que la turnó a la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Corrección Federal No 3, que ha citado a declarar a los exvicarios regionales del Opus Dei Carlos Nannei, Patricio Olmos, Víctor Urrestarazu y al sacerdote Carlos Dondo, encargado de la rama femenina, así como a Mariano Fazio, quien fungió como la máxima autoridad de la organización religiosa entre 2010 y 2014.
Turnada al juez Daniel Rafecas, la investigación confirmó la existencia de 44 casos de explotación, de los cuales “cuatro podrían enmarcarse bajo la Ley de Trata, que entró en vigor en mayo de 2008”, y de estos están a punto de prescribir porque “están en el límite o superan los 12 años desde que ocurrieron los hechos denunciados”.
En el reportaje, Bistagnino cuenta que el caso que tiene posibilidades de proceder legalmente es el de una mujer que fue sometida a servidumbre durante 31 años, identificada con las iniciales M.I.E., quien fue sometida por el Opus Dei en Argentina, cuando en 1984, cuando tenía 17 años.
De acuerdo a la información, el caso de M.I.E.es emblemático porque expone el maltrato sufrido por las 44 mujeres identificadas en la investigación realizada por Protex.
Según la indagatoria M.I.E., originaria de Bolivia, contaba solamente con instrucción primaria, cuando se dirigía junto con su hermana a Buenos Aires, donde las esperaba una tía que se había comprometido a ayudarlas para continuar sus estudios.
La historia refiere que en el autobús hacia Argentina una mujer les ofreció educación, trabajo y vivienda, bajo instrucción religiosa. por lo que las acompañó hasta la casa de la tía, quien convención de dejar a las adolescentes a su cargo.
Sin embargo, ya en los dominios del Opus Dei en Argentina, las jóvenes fueron obligadas a trabajar en tareas domésticas sin percibir remuneración alguna, “mientras las obligaban a asistir a misa, confesarse y conversar con directoras”.
Durante 31 años M.I.E. fue obligada a servir a la jerarquía del Opus Dei, y cada vez que intentaba deslindarse, era buscada por sus reclutadores que recurrían a la presión psicológica, diciéndole que “Dios la quería para la Obra”, obligándolas a asumir “compromisos de castidad, pobreza y obediencia”,
De acuerdo a la narración periodística, las hermanas bolivianas estuvieron sirviendo a la orden católica en diversas ciudades argentinas e inclusos fueron llevadas en 1993 a Roma, “bajo las mismas condiciones de precariedad, sin pago ni seguro médico, sin comunicación con s u familia”, hasta el año 2000 en que ambas retornaron a Argentina.
En 2001, la hermana de M.I.E. logró salir de la congregación, pero ella lo logró hasta 2015, cuando tenía 47 años, “y una década de depresión que el Opus Dei atendió con una psiquiatra propia y una montaña de pastillas”.
La periodista del portal español explica que “el caso de M.I.E. podría ser el primero en el mundo que reúna las condiciones para que el Opus Dei tenga que enfrentar a la justicia de un país acusado por trata de personas para servidumbre”, situación que se ha registrado no sólo en Argentina, sino también en Paraguay, Uruguay y Bolivia, de acuerdo a denuncias dadas a conocer en 2021 “y después en una presentación ante el Tribunal para la Doctrina de la Fe del Vaticano que aún no tuvo respuesta”.