CIUDAD DE MÉXICO (apro).– La policía parisina disparó e hirió de gravedad a una mujer con hiyab que, de manera amenazante, comenzó a gritar: “¡Allahu Akbar!” y “¡van a morir todos!”, dentro de una estación del Metro, el 31 de octubre por la mañana, de acuerdo con el informe del jefe de la policía de París, Laurent Núñez, informó DW en español.

La mujer, completamente cubierta, fue baleada en la estación Bibliothèque Nationale de France.

El portavoz del Gobierno, Olivier Veran, informó que la mujer había “proferido palabras agresivas y yihadistas”, y cuando llegó la policía, “le pidieron que se calmara, pero también que mostrara las manos para cerciorarse que no representaban peligro alguno”.

Sin embargo, la mujer no atendió las recomendaciones de  las fuerzas de seguridad, por lo cual le dispararon dada la peligrosidad de la situación”, justificó la policía.

El servicio de bomberos, que atendió de urgencia a la mujer, dijo que había sido alcanzada por una bala en el abdomen, por lo que fue trasladada a un hospital cercano.

Mientras tanto, Francia está en alerta máxima después del asesinato, el 13 de octubre, de un maestro de escuela en un presunto atentado islamista, que las autoridades consideran parte de un “ambiente yihadista” relacionado con la guerra entre Israel y Gaza.

En Los Ángeles, California, Estados Unidos, un hombre intentó entrar a una casa para gritar “maten a los judíos”. En Londres, en un parque infantil le dicen a las niñas “judías apestosas” y no las dejan subirse a los juegos. En China, en redes sociales comparan a los judíos con parásitos, vampiros o serpientes, dichos comentarios reciben miles de likes, “me gusta”.

El antisemitismo ha ido en aumento en todo el mundo desde el 7 de octubre, cuando Hamás atacó el sur de Israel, matando y secuestrando a decenas de personas, así como la respuesta de Israel bombardeando la Franja de Gaza, donde han perdido la vida más inocentes palestinos que hombres del grupo terrorista Hamás.

“Es el momento más aterrador para ser judío desde la Segunda Guerra Mundial. Hemos tenido problemas antes, pero las cosas nunca habían estado tan mal en toda mi vida”, indicó Anthony Adler, de 62 años, al salir de una sinagoga en Golders Green, un barrio londinense donde vive una gran comunidad judía.

Sin importar cualquier opinión sobre el conflicto, incluyendo a los extremadamente críticos del gobierno israelí, para ellos ser judío es igual a ser israelí, lo que significa que matan niños palestinos, consideró la politóloga Nonna Mayer, de la CNCDH francesa, una comisión de derechos humanos independiente.

El incidente antisemita más escalofriante a nivel mundial fue el asalto a un aeropuerto de la región rusa de Daguestán por parte de una multitud enfurecida que buscaba judíos para hacerles daño, después de que llegó un vuelo de Tel-Aviv.