WASHINGTON (apro). – Raphael Warnock derrotó en la segunda vuelta de elecciones a su contrincante, el republicano, Herschell Walker, obteniendo así su reelección como senador federal por el estado de Georgia y afianzando al partido demócrata como mayoría en el Senado.

La victoria de Warnock no sólo otorga a los demócratas el control de 51 de las 100 curules de la Cámara de Senadores en el Congreso federal contra 49 de los republicanos, sino que también implica una derrota y otro revés para el expresidente Donald Trump.

La segunda vuelta de elecciones en Georgia para resolver el puesto en el Senado era el último escaño pendiente en el Capitolio correspondiente a las elecciones intermedias de noviembre pasado, en las que la Cámara de Representantes les fue arrebatada a los demócratas por los republicanos.

Warnock se convierte en el tercer senador federal afroamericano pero su triunfo da a los demócratas el Control de la Cámara Alta sin la necesidad de la intervención de la vicepresidenta Kamala Harris (presidenta del recinto legislativo), en caso de que los republicanos hubiesen ganado.

Para Trump que escogió personalmente a Walker como candidato republicano, lo ocurrido en Georgia los consolida como el gran derrotado de las elecciones intermedias, en su afán por nuevamente en 2024 buscar la nominación presidencial.

En Washington el establishment del partido republicano que desde los comicios del pasado mes de noviembre ha marcado distancia de Trump, se concentrará en el control mayoritario en la Cámara de Representantes para contrarrestar a las políticas y acciones del presidente Joe Biden.

Las autoridades electorales de Georgia dieron este martes 6 de diciembre por la noche la declaratoria de triunfo a Warnock, quien derrotó ahora con mucha facilidad a su contrincante, un exjugador profesional de fútbol americano e inexperto en política estatal y federal.

La reelección de Warnock que lo mantendrá 6 años en el Senado marca la erosión que ha sufrido Trump entre la población y electorado estadunidense tras el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 y por su estado de negación a aceptar su derrota ante Biden.

El fracaso electoral de Walker se suma a otras desavenencias para Trump, como las acciones judiciales en su contra en Nueva York y las acciones que está tomando el fiscal especial del Departamento de Justicia Jack Smith que investiga su posible involucramiento criminal en el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021.