BERLÍN (DPA/EP).– La canciller alemana, Angela Merkel, recordó este sábado a las víctimas del atentado xenófobo ocurrido el 19 de febrero de 2020 en la localidad de Hanau, en el que fallecieron a tiros nueve extranjeros, a pocos días del primer aniversario del incidente.

“Fue un crimen de odio, de odio racista", lamentó la mandataria antes de sentenciar: "El racismo es un veneno. El odio es un veneno". "Nos oponemos con toda nuestra fuerza y determinación", prosiguió, "a quienes intentan dividir a Alemania".

El 19 de febrero de 2020, un alemán de 43 años disparó y mató a nueve extranjeros en Hanau, localidad del estado de Hesse. A continuación, asesinó a su madre y se suicidó. Previamente el agresor había publicado en Internet opiniones racistas.

“Solo los odiaba por su aspecto, por el origen de sus familias, por ser inmigrantes o hijos de inmigrantes", acotó Merkel en su videomensaje, señalando que el asesino no conocía a sus víctimas.

La mandataria indicó que el gobierno alemán está aplicando medidas concretas para combatir el extremismo de derecha y el racismo, y añadió que las víctimas están recibiendo un mejor apoyo y que las fuerzas de seguridad están siendo reorganizadas y reforzadas.