WASHINGTON (apro) – El gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció la revocación de designación como organización terrorista internacional a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

“Tras el Acuerdo de Paz de 2016 con el gobierno colombiano, las FARC se disolvieron y desarmaron formalmente. Ya no existe como organización unificada dedicada al terrorismo o a actividades terroristas, ni tiene la capacidad o la intención de hacerlo”, anunció Antony Blinken, el secretario de Estado a nombre del presidente Biden.

En su declaración por escrito, el encargado de la política exterior de Estados Unidos aclara que la revocación “no cambia la postura” con cualquier acusación o posible acusación contra exlíderes de las FARC involucrados en el narcotráfico.

“No obstante aumentará la capacidad de Estados Unidos para apoyar a la aplicación del acuerdo de 2016, lo que incluye el trabajo con combatientes desmovilizados”, agregó Blinken.

En paralelo al anuncio sobre las FARC, el presidente de Biden dio a conocer que designa como “organización terrorista extranjera” a la fracción mimetizada de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo conocida como FARC-EP, y a la agrupación Segunda Marquetalia.

El Departamento de Estado por igual etiquetó como terroristas internacionales a los cabecillas de dichas organizaciones, Luciano Marín Arango, Hernán Darío Velásquez Saldarriaga, Henry Castellanos Garzón, Néstor Gregorio Vera Fernández, Miguel Santillana Botache y Euclides España Caicedo.

“La designación de las FARC-EP y la Segunda Marquetalia está dirigida a quienes se negaron a desmovilizarse y a quienes participan en actividades terroristas”, enfatizó el secretario de Estado.

Estados Unidos sostiene que las dos agrupaciones ahora designadas como grupos terroristas internacionales, desde hace cinco años llevan a cabo atentados y ataques contra objetivos de paz en Colombia, como el asesinato de exmiembros de las FARC y líderes comunitarios.

“La Segunda Marquetalia también ha participado en la destrucción masiva, el asesinato y la toma de rehenes, incluidos el secuestro y la detención de empleados gubernamentales para pedir rescates”, sostuvo Blinken en su declaración por escrito.

Los dos grupos designados como terroristas internacionales por el Departamento de Estado y sus líderes quedan sujetos a sanciones y confiscaciones de bienes y cuentas bancarias por parte del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos.