CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Después de cuatro años, y unas horas después de que Joe Biden rindió protesta como presidente de Estados Unidos, la página oficial de la Casa Blanca reactivó una sección en idioma español que había sido eliminada por su antecesor Donald Trump.

También activó la cuenta de la Casa Blanca en Twitter.

Además, después de la ceremonia de juramentación de Biden, los Archivos Nacionales también lanzaron su sitio web para la Biblioteca Presidencial Donald J. Trump con la versión de la página www.whitehouse.gov del exmandatario, donde archivó las publicaciones en redes sociales e investigaciones sobre su mandato.

En 2017, el entonces secretario de prensa, Sean Spicer, argumentó que el sitio sería restaurado, pero eso nunca sucedió. En ese momento, la entonces asesora de Trump, Helen Aguirre Ferré, aseguró a EFE que comprendía “la importancia y el interés” de tener información en español, pero nunca se concretó la medida.

Aunque la cuenta de Twitter para comunicaciones en español @CasaBlanca siguió operando durante el tiempo de Trump en el cargo, lo cual representó una divergencia de una costumbre de la oficina presidencial que habían tenido los expresidentes Barak Obama y George W. Bush.

“La falta de una página de la Casa Blanca en español bajo Trump también reflejó los sentimientos que él había expresado en la campaña electoral. Justamente, él ahora expresidente afirmó que los inmigrantes en Estados Unidos ‘tienen que hablar en inglés’ porque Estados Unidos ‘es un país donde hablamos inglés, no español”, informó CNN.

En 2016, Trump había lanzado como plataforma de campaña presidencial la propuesta de detener la inmigración a Estados Unidos y se enfocó en los migrantes latinoamericanos, pero principalmente los mexicanos y del Medio Oriente.

Su decisión fue reforzada por comer en un restaurante conocido por la polémica decisión de su propietario de colocar un letrero que decía: “Esto es Estados Unidos. Cuando ordene hable inglés” durante su campaña presidencial e incluso trató de usar como arma política el bilingüismo de su oponente republicano, Jeb Bush.

“Me gusta Jeb, pero realmente debería dar el ejemplo hablando en inglés mientras esté en Estados Unidos”, indicó entonces.