CIUDAD DE MÉXICO (apro).—Impulsadas por la entrada de los Derechos Especiales de Giro (DEG) otorgados por el Fondo Monetario Internacional (FMI), la reservas internacionales –administradas por el Banco de México—ascendieron a un nivel récord de 205 mil 391 millones de dólares.

Este incremento se debe, en su mayoría, a la asignación de 8 mil 542.4 millones de los DEG por el FMI que equivalen a 12 mil 311 millones de dólares al 27 de agosto. Esto compensó la tendencia a la baja de estos activos observada durante agosto, pues se redujeron en 270 millones de dólares en las primeras tres semanas, o cerca del 0.14% respecto al cierre de julio, hasta un total de 193 mil 153 millones de billetes verdes.

La asignación de DEG a México forma parte de los esfuerzos del FMI para combatir los efectos económicos de la pandemia del covid-19, de acuerdo con el análisis del Grupo Financiero Monex.

Estos instrumentos financieros fueron creados para complementar las reservas oficiales de los países miembros, con el objetivo de proveer liquidez bajo escenarios de incertidumbre para los mercados financieros.

Por lo tanto, el FMI emitió la mayor asignación en su historia el mes pasado, pues la persistencia de la pandemia y la propagación de la variante Delta han ocasionado la reimposición de medidas de confinamiento y cautela entre los inversionistas.

 Ahora, el banco central cuenta con un fuerte escudo en contra de los choques externos, lo que permitirá asegurar una recuperación ordenada de las condiciones financieras.

El pasado 29 de agosto, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) señaló que dado que el nivel de reservas internacionales es alto, y que agregar recursos a estas reservas implica un costo, la dependencia encabezada por Rogelio Ramírez de la O dialogará con el Banxico en términos normativos para que el gobierno de México aproveche estos recursos para pagar deuda con tasas de interés altas.

“El objetivo de este intercambio es abonar a la disciplina fiscal. Al cancelar esta deuda, se logra un ahorro en el costo de la misma, así como un beneficio en el nivel de la deuda y, como consecuencia, un impacto positivo para el presupuesto”, detalló la SHCP.