CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El "Kaiser" Franz Beckenbauer, el futbolista que ganó todo lo que se puede ganar como jugador falleció a los 78 años de edad. Es considerado uno de los mejores defensores centrales de la historia. 

“Con profunda tristeza tenemos que anunciar que mi esposo y nuestro padre, Franz Beckenbauer, falleció serenamente mientras dormía ayer, domingo, rodeado por su familia”, dijo la familia en un comunicado divulgado por la agencia de noticias dpa.

“Les pedimos que nos permitan guardar luto en paz y no hacernos preguntas”, indicaron. 

Como jugador y técnico, Beckenbauer fue una figura transformadora del futbol alemán. Fue el capitán de la selección de Alemania Occidental que se proclamó campeona como anfitriona en el Mundial de 1974. También dirigió al equipo nacional que se consagró en el Mundial de 1990 tras derrotar a Argentina en la final.

Nacido el 11 de septiembre de 1945, el Kaiser formó parte de las filas del Bayern Múnich desde 1965 hasta 1977, logró 44 goles en 396 partidos de Bundesliga. Ostenta el título de capitán de honor tanto con la selección alemana, como con el Bayern Múnich.

Fue junto a Pelé, Cruyff y Maradona uno de los mejores jugadores del siglo XX.

En su carrera de entrenador, fue campeón de liga con el Bayern en 1994 y de la copa de la UEFA en 1996; entrenó al equipo nacional alemán llegando a ser subcampeón en el mundial de 1986 y campeón en 1990.

El Kaiser fue presidente del FC Bayern München eV de 1994 a 2009 y también presidente del Consejo de Supervisión de FC Bayern München AG de 2002 a 2009.

Además, Beckenbauer fue miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA hasta el 1 de junio de 2011. Tras presidir el comité de la candidatura para la Copa del Mundo de 2006, también fue el responsable de la organización de la Copa del Mundo de 2006 en Alemania.

Su labor también ha sido premiada lejos de los terrenos de juego pues ha sido galardonado con la Hoja de laurel de plata del gobierno bávaro y la Gran Cruz al mérito de la República Federal alemana.

El 27 de noviembre de 2009 fue nombrado presidente honorario del FC Bayern de Múnich. El club muniqués además le organizó un partido homenaje el 13 de agosto de 2010 ante el Real Madrid.