CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Con las notas emanadas del prestigiado pianista Simon Graychi como una de las figuras centrales de la obra y la bailarina Elisa Carrillo haciendo gala de su arte, la noche de este miércoles se estrenó la obra “Alma en movimiento” en el Palacio de Bellas Artes, pieza que a su vez cerró el festival Danzatlán 2024.

El programa incluyó música de obras maestras como Le Parc, Dying Swan, Mozart y el vibrante Danzón No. 2, más la riqueza del repertorio clásico y contemporáneo de la danza, de esta manera “Alma en movimiento” cautivó y conmovió al público asistente al palacio de mármol desde el primer minuto de la obra.

Cuando se anunció en conferencia la programación de Danzatlán (promovida por Carrillo), además de la ‘Gala Elisa y Amigos’ que cada año suele ser la ‘cereza del pastel’, el anuncio del estreno de la obra “Alma en movimiento” captó la atención por la minuciosa selección de los artistas en una obra más orientada al contemporáneo y música en vivo:

El prestigioso pianista franco-mexicano-libanés Simon Graichy, más los bailarines Krasina Pavlova (Bulgaria), solista de la Compañía de Ballet de Berlín; el primer bailarín David Motta Soares (Brasil), el solista Alexei Orlenco (Moldavia) –ambos del Ballet Estatal de Berlín–, y Elisa Carrillo, primera bailarina del Staatsballet Berlin.

Si bien la obra se mostró el pasado 8 de agosto en el Centro Cultural Mexiquense Bicentenario con entrada libre al público y lleno total, el Palacio de Bellas Artes era espacio obligado para presentar semejante acto que a su vez marcó el regreso de Danzatlán al máximo recinto cultural del país.

La realización de “Alma en movimiento” incluyó la dramaturgia de Christiane Theobald, exdirectora artística adjunta y miembro honorario del Ballet Estatal de Berlín; la dirección artística de Mikhail Kaniskin, primer bailarín internacional y director artístico de Danzatlán; los efectos del músico y compositor italiano Jacopo Baboni Schilingi, pionero en el uso y composición de música con inteligencia artificial del Ballet Estatal de Berlín.

En total ocho piezas coreográficas y poco más de una hora y media de obra que se ganaron al público, pues los bailarines en escena en actos en solitario, en duplas femeninas o masculinas, tríos y en sus puntos álgidos en cuarteto narraron momentos de enamoramiento, sensualidad, miedos, dominación, creación y por sobre todo emoción, misma que el público se encargó de transmitir al caer el telón luego de la energía contenida a lo largo de la función.

Con esta obra, Danzatlán cierra su séptima edición efectuada ente el 4 y 14 de agosto y medio centenar de actividades a lo largo de 11 días, en su mayoría efectuadas en el Estado de México, seguido de Puebla y una (‘Alma en movimiento’) en Ciudad de México.

En entrevista con Proceso tras la última conferencia de prensa, Elisa Carrillo se dijo siempre dispuesta a colaborar con autoridades federales y capitalinas en el marco de la nueva administración cultural, quizá como un guiño para que Danzatlán regrese a Bellas Artes en próximas ediciones tal vez con un mayor número de funciones.