INAH
Trabajadores, colectivo, sindicatos, inconformes con la dirección del INAH
Esta amplia organización, que ha emitido en sus diversos sectores un diagnóstico crítico sobre el instituto, y ante la continuidad del director general Diego Prieto, solicitaron a la nueva secretaria de Cultura federal, Claudia Curiel de Icaza, un encuentro.CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).– Luego de dar a conocer públicamente un diagnóstico del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el recién conformado Colectivo de Trabajadoras y Trabajadores del INAH se dice en espera del diálogo prometido por Claudia Curiel de Icaza.
Ello, a la par de cartas de tres sindicatos y un documento independiente de trabajadores de distintos Centro-INAH del país que cuestionan el proceder del último sexenio de la direccional general, comandada por Diego Prieto.
Y más: Se suma una cita al arqueólogo Fernando Cortés de Brasdefer -con 45 años de trayectoria en el INAH-, para comparecer el próximo 5 de noviembre por una presunta falta administrativa, tras haber denunciado el posible saqueo y destrucción del patrimonio público derivados del Tren Maya, en una carta difundida en 2023.
En efecto, el 11 de octubre el Órgano Interno de Control de la Función Pública emitió el citatorio para rendir declaración escrita o verbal y presentar pruebas en su defensa.
Secuencia del conflicto
En agosto pasado, en conferencia de prensa, el colectivo presentó su “Diagnóstico Integral del INAH”, soportado por un “Memorial de Agravios” más un “Estudio de Regionalización” (con opiniones y encuestas de los Trabajadores), aclarando que no se trataba de una confrontación con Prieto:
“Hemos decidido de manera honesta y concreta llamar al diálogo sobre el estado de la institución con la idea de mejorar nuestras condiciones y el carácter de desempeño. No despreciamos, no desconocemos nada, no es ataque ni confrontación con organizaciones colegidas, agradecemos todo el esfuerzo por parte de compañeros que han trabajado incansablemente...”.
Y tras señalar que “no respondemos a Diego Prieto”, se trataba de aportar elementos ante una realidad pública a partir de una visión que centraliza y se llama Tren Maya:
“Esa es la realidad, una imagen que habla de que se reconocen avances con investigación arqueológica, que con matices aporta positivamente, pero que contrasta con una Pirámide del Sol o un museo en Chihuahua en completo abandono, sanitarios que no cuentan con papel higiénico, es una realidad que debe sopesarse”.
Sin embargo, tras la posesión de Claudia Sheinbaum como presidenta de la República el 1 de septiembre, la llegada de Claudia Curiel de Icaza a la Secretaría de Cultura federal y la ratificación de Diego Prieto al frente del INAH, hubo una respuesta por parte del Sindicato Nacional de Profesores de Investigación Científica y Docencia para impugnar la continuidad de Prieto al igual que la del Sindicato Nacional Trabajadores Administrativos, Manuales, Técnicos y Profesionistas (SNTAMTP), seguida por documentos con diversos señalamientos sobre el mal estado del INAH y condiciones laborales por parte de los sindicatos nacionales de Arquitectos Conservadores del Patrimonio Cultural y de Restauradores (Sinar). En el caso de las últimas tres misivas con fechas del 7 de octubre.
A lo anterior se sumaron 121 trabajadores independientes, más 11 jubilados impugnando a Prieto en un documento con fecha del 20 de octubre, en donde aparecen nombres y centros de trabajo; firman investigadores (incluidos dos eméritos) de distintos Centro-INAH del país, coordinadores, directores, subdirectores, personal del Museo Templo Mayor, Zona Arqueológica de Teotihuacán, Biblioteca Nacional de Antropología e Historia, ENCRyM (Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía) y ENAH (Escuela Nacional de Antropología e Historia.
El comunicado del Sindicato Nacional de Profesores de Investigación Científica y Docencia, dirigido a Claudia Sheinbaum, expresa su desacuerdo con la administración de Prieto. Ofrece un listado de razones como precarización de instalaciones, falta de contrataciones y la polémica del salvamento arqueológico en el Tren Maya:
La administración a su cargo se ha caracterizado por la pauperización de las escuelas del INAH y de todo el Instituto; creció la casta dorada de la burocracia administrativa; implantó una estructura directiva basada en el nepotismo y una red de lealtades.
En el caso del SNTAMTP, los trabajadores emitieron un “Posicionamiento ente la ratificación de Diego Prieto Hernández”, en donde manifiestan su total desacuerdo:
“El discurso público y oficial sobre el Instituto no refleja la realidad que se vive en los distintos centros de trabajo del país y que afectan sensiblemente sus facultades para proteger y difundir el patrimonio cultural. Además, se ha dedicado a bloquear y violentar los derechos humanos, laborales y sindicales de los trabajadores que convergemos en esta institución”.
Afirmando que no se han cumplido compromisos acordados, negativa a implementar mesas de trabajo resolutivas y trato diferenciado y preferencial entre sindicatos, más 12 puntos de asuntos pendientes con dicho sindicato. Al calce, la firma de puño y letra.
Los Arquitectos Conservadores del Patrimonio Cultural relatan que no comparten tampoco la visión de su director general, además de mencionar incumplimientos ante condiciones de trabajo y convenios por prestaciones socioeconómicas, signado por el secretario general, de asuntos laborales, finanzas y organización:
“(…) se han acentuado los deteriores de la infraestructura y espacios físicos de deterioro en oficinas de las secciones de monumentos históricos de diversos centros de trabajo, insalubres en el caso de Veracruz, de hacinamiento en Guanajuato e inseguridad en Colima y Sinaloa. Los equipos de cómputo entregados que no cuentas con los programas que se requieren para las diversas labores que realizan los compañeros, escases de vehículos en buen estado con combustible limitado y la no dotación de viáticos para realizar visitas de inspección, suspensiones y supervisión de obra, señalando a los compañeros la obligación de cumplirlas a su costo, así como también escasean los insumos para oficina...”.
Mientras que los Restauradores ahondaron en un breve análisis y un diagnóstico presentado sobre la plantilla laboral, donde mencionan la precariedad para laborar, burocratización, violación de derechos laborales y de Condiciones Generales de Trabajo, además de mencionar la presencia de Guardia Nacional en zonas arqueológicas “que lejos de favorecer el disfrute de los espacios culturales provoca inquietud”, cerrando con lo siguiente:
“...desde nuestra perspectiva, aunque ha habido algunos logros, hemos detectado, que, tal como lo hemos manifestado, durante su gestión se han llevado acciones que han afectado a los trabajadores y debilitado a la institución”.
Y si bien consideran que “muchas de estas medidas eran impuestas por la SCHP”, el INAH necesita que Prieto “exprese un posicionamiento auténtico en defensa de la institución y no actúe como un soldado obediente”.
En tanto, firmantes en una carta denominada Trabajadoras y Trabajadores del INAH --con copia a los seis sindicatos y el Colectivo de Trabajadoras y Trabajadores-- impugnaron la ratificación de Prieto. De 13 puntos, el primero es “la grave inoperancia administrativa existente en la institución”:
En efecto el INAH tiene necesidades, como afirma su actual director recientemente en la prensa. Sin embargo, la más apremiante de ellas es la falta de una direccional coherente con la razón de ser del instituto. Esta carencia a su vez ha generado ya afectaciones institucionales y agravios colectivos que no son nuevos.
El 21 de octubre, representantes de sindicatos de la Secretaría de Cultura, Órganos Desconcentrados y Entidades se reunieron con Curiel de Icaza y Diego Prieto, pero en un acto protocolario, como primer acercamiento de la nueva secretaria con trabajadores del INBAL e INAH.
En la reunión (con fotografía subida por Curiel de Icaza en sus redes sociales), uno de los miembros del Colectivo de Trabajadoras y Trabajadores entregó directamente a la titular de Cultura el “Diagnóstico Integral del INAH”, “Memorial de Agravios” y “Estudio de Regionalización”, tras lo cual la funcionaria prometió reunirse con ellos luego de ver toda la documentación.
En entrevista con Proceso, Ximena Rojas, José Manuel Figueroa, Cuauhtémoc Velasco y Silvia Sánchez Sepúlveda, trabajadores del instituto, resaltaron la importancia de la entrega de esos documentos:
“El objetivo del colectivo siempre fue hacer un diagnóstico para ver la situación de la institución y derivar en una serie de propuestas y temáticas que se tendría que tratar con la nueva administración. El primer documento era dirigido a los presidenciales, luego a la secretaria de Cultura, y a Claudia Sheinbaum, En este momento la idea es tener una mesa de trabajo con la nueva secretaria, platicar sobre el documento a fondo, y luego las propuestas”.
A pregunta expresa sobre si buscarán un acercamiento con Diego Prieto, titular del INAH, respondieron con un rotundo “no”. Dijo Figueroa:
“Él nos invitó a estar en una reunión a la que finalmente no accedimos porque nuestro llamamiento era en ese entonces a los presidenciables, la armó finalmente para gente cercana para luego decir que haría un diagnóstico, nos copiaba las iniciativas...
“Fui yo quien se acercó al final de la reunión con secretarios generales y le comenté que los compañeros del colectivo me pidieron que se la entregara, se la envié por correo electrónico, le dije ‘te lo entregamos impreso para que lo revises, que lo vean, lo tomen, en cuenta…”.
Le recordó a Prieto que habían solicitado una reunión, a lo cual respondió que “la tenía planteada”.
Afirmaron ser un grupo de trabajadores o un grupo de opinión, donde no hay cabezas, que plantean una agenda con Claudia Curiel de Icaza para ver cómo resolver la problemática del INAH, y que la diferencia de los sindicatos es que éstos tienen que plantearse su proceder a partir de sus bases de trabajo.
A la par de aguardar por el diálogo con la secretaria de Cultura, apuntaron que realizarán mesas abiertas a trabajadores del INAH y ciudadanía en general.
Respecto a la última entrevista de Proceso con Diego Prieto, aparecida en el Mensual de octubre, sin entrar en confrontaciones, relataron:
“Descalificaba a los trabajadores, y es una visión que el director tiene del instituto, porque la respuesta de los trabajadores en los tres documentos elaborados es distinta. El INAH no está en su mejor momento, tiene una serie de problemáticas tanto en lo interno como derivadas de las políticas públicas establecidas por la SHCP, y sí consideramos que se requiere que al frente del instituto esté una persona que realmente fortalezca al instituto. Vemos con preocupación que nuestra institución se debilita económicamente”.
Y tras señalar que “en todas las entrevistas (Prieto) presenta un INAH sin problemas” y sin “una sola autocrítica”, eso les preocupa, “porque cuando tienes los ojos tan vendados… estás convencido de que todo está bien y desdeñas las críticas”, para culminar:
“A partir de los documentos entregados hemos demostrado que al INAH le falta presupuesto, atención y mucho diálogo. Una de las cosas que padecemos es que es un ‘monólogo’ porque llegas a platicar con él, él es quien habla y habla, se va y se acabó”.
El Colectivo de Trabajadores y Trabajadoras del INAH laboran en estos días en mesas de trabajo que presentarán con fechas y horarios a través de un programa público que darán a conocer en breve.