Olga Tañón
“Electrizante” fiesta de salsa, merengue y ritmos latinos con Olga Tañón
La cantautora puertorriqueña dio a conocer a Proceso en entrevista previa que se trata de un regreso especial luego de no pisar México en 11 años: “Es mi regreso a México, y no será sólo un show, será un suceso”.CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- La cantautora puertorriqueña Olga Tañón retornó a esta ciudad tras más de una década de ausencia, presentándose en el Auditorio Nacional con su espectáculo “Electrizante” en candente fiesta de salsa, merengue y ritmos latinos.
La artista dio a conocer a Proceso en entrevista previa que se trata de un regreso especial luego de no pisar México en 11 años:
“Es mi regreso a México, y no será sólo un show, será un suceso”.
Ya en el Auditorio, y en el primer espectáculo del 2024 en este magno recinto, Olga Teresa Tañón Ortiz movió las emociones de la fanaticada a los primeros pasos en el escenario. El público saltó velozmente de sus butacas bailando al arranque de “Muchacho malo”.
En un formato íntimo, los asistentes disfrutaron de una colorida presentación. En la pantalla a telón de fondo se proyectaron vistosas imágenes de arte digital, aderezando ambientaciones de identidad latina. A su vez, se estilizó escénicamente constantes cambios de vestuarios, adicionando un convite de bailarinas y bailarines danzando en incesantes coreografías.
Se escucharon temas cómo “Qué grande es este amor”, “Vendrás llorando”, “No me puedes pedir”, “Vuela muy alto”, “Cómo olvidar” y “Contigo o sin ti”.
La cantante de 56 años así saludó a su gente:
“¡Hay que ser agradecidos! ¡Buenas noches tengan todos! ¿Saben una cosa? ¡Me han hecho un sueño realidad!”.
La ganadora de dos Premio Grammy, cuatro veces del Grammy Latino y 31 veces de los Premios Lo Nuestro, aprovechó el momento para congratular a la actriz y cantante costarricense mexicana, Maribel Guardia, quien se encontraba en el recinto y se levantó de su asiento para saludar a los reunidos.
Se añadió “Serpiente mala”. Además de “Yerbero moderno”, “La vida es un carnaval”, “La negra tiene tumbao” y “Quimbara”, en tributo a la legendaria Celia Cruz (1925-2003).
Tañón trazó una velada de conexión con sus fans. Ella fue amable, compartió su sentido del humor, siendo correspondida en aplausos, baile y coreos. Incluso dedicó un fragmento del tema “Venezuela” al público que acudió de ese país, a quienes se les divisaba alzando sus banderas:
Y si un día tengo que naufragar,
Y el tifón rompe mis velas,
Enterrad mi cuerpo cerca del mar,
En Venezuela…
El acto avanzó ágil delineando “Bandolero” y “Así es la vida”. En mensaje explicó a sus fans el motivo de su ausencia de los escenarios por motivos familiares, dando continuas gratitudes:
“¡El volver a retomar a nivel internacional mi carrera para mí es una emoción muy grande!”.
Después de “Cuando tú no estás”, recordó su tierra natal brindando estrofas de “Preciosa”:
Yo sé lo que son los encantos,
De mi Borinquen hermosa,
Por eso la quiero yo tanto,
Por siempre la llamaré ‘Preciosa’,
Isla del caribe,
Isla del caribe…
Honró a la insigne agrupación El Gran Combo de Puerto Rico tocando “No hay cama pa' tanta gente” y continuar en “Cosas del amor”, recordando a Jenni Rivera (1969-2012).
Convidó al joven mexicano Jimmy Rodríguez a dueto al son de “Escondidos”, corte originalmente cantado con Cristian Castro. Se consideró “Mi eterno amor secreto”, “Basta ya”, “Mi forma de ser”, “Presencié tu amor”, “Entre la noche y el día”, “Una noche más” y “La vida da vuelta”.
La celebración de poco más de dos horas dirigió el ocaso a los ritmos de “Achilipu” y “Es mentiroso”, concluyendo en “La gran fiesta” y una lluvia multicolor de papelillos flotando en el lugar. Olga Tañón dio retirada sonriente, halagada de aplausos y griteríos, sin faltar los clamores insaciables deseando “¡otra, otra, otra!”.