Música
Iván Rosas, bohemia rupestre en Cuba 74
El recital, desde los primeros pasos del maestro Iván Rosas, con guitarra acústica en mano, emprendió una selección especial de rolas que calentaron emociones. “Andando lejos” y “Corrida de toros”, conformaron el repertorio aplaudido por el selecto público reunido en el recinto.CIUDAD DE MÉXICO (apro).–Una emotiva bohemia rupestre de hermandad y camaradería, ofreció este jueves el cantautor mexicano Iván Rosas en la intimidad del espacio cultural Cuba 74 en el Centro Histórico de esta ciudad.
El recital, desde los primeros pasos del maestro Iván Rosas, con guitarra acústica en mano, emprendió una selección especial de rolas que calentaron emociones. “Andando lejos” y “Corrida de toros”, conformaron el repertorio aplaudido por el selecto público reunido en el recinto que lleva el nombre de su calle y número, Cuba 74.
El lugar es sintético, es un departamento confeccionado en espacio cultural. En su sala se reciben a los invitados, al fondo, se da cabida a los artistas. El concepto está dirigido y fundado por Marlon Berlanga Sánchez en su propio hogar, donde recibe alternativas artísticas independientes. En su breve historia, Cuba 74 ha sido visitada por el compositor Carlos Arellano, el hidalguense Francisco Barrios “El Mastuerzo” y el veracruzano Rafael Catana, entre otros.
Considerado como “Un eslabón perdido de los rupestres”, Iván entonó “Es”, para inmediatamente agradecer la recepción:
“El Centro Histórico para mí representa muchas cosas. Cerrar este año, en un lugar chico, pero adentro de un universo enorme, es muy emocionante”.
En constante diálogo con la congragación cantó “La Canícula”, recordando que la pieza fue realizada para el Coro Polifónico del Estado de México.
El músico radicado en Milán, Italia, dio continuidad compartiendo escenario junto a la cantante mexicana Mariana Santiago. Ella entonó una adaptación de Rosas, a fragmentos de “Los ojos de los peces”, poema que forma parte del libro “Álbum de zoología” del escritor, poeta y cronista José Emilio Pacheco (1939- 2014). Mariana además coreó el tema “Colibrí” y “Luces de colores”.
El trovador continuó la celebración al ritmo de “Negrita bella” y “Junior”, reconociendo su inspiración rupestre. Aprovechó para honrar a Rafael Catana, aunque sin su presencia.
Tocó durante la velada decembrina “El hombre en la luna”, así como la solicitada “El diablo y yo”. Se acompañó del cantor italiano Alessandro Sicardi “Kape”, quien interpretó “Screaming out”. Al ocaso Iván Rosas vocalizó “Cuatro santitos”, finiquitando en una ola de felicitaciones.
Para el cerrojazo en palomazo se escuchó a Gabriel “Gabo” López del proyecto Lost Acambay, en acompañamientos musicales de la joven Kat Li.
Durante el festín el poeta Mario Cruz recitó versos de su libro “Cómo escribir un soneto”. Al igual se presentó la obra pictórica del artista oaxaqueño Filogonio Naxin. El escritor y cuentacuentos, nacido en Oaxaca, “Marconio” (Marco Antonio Vázquez Barrera), narró adaptación a “Los hombres que dispersó la danza” de Andrés Henestrosa. Reconocieron la labor de Rodrigo de Oyarzaba de Radio Educación. También distinguieron la misión de las mujeres que forman parte de Cuba 74, como un espacio abierto e incluyente a las artistas femeninas.