Computación
Computación: Mecanismos contra la piratería
El acceso a la tecnología ha permitido a cualquiera copiar discos compactos de música, de datos y DVDs con películas. Incluso hay posibilidades de hacerse de aparatos para copiar cartuchos de juegos para diferentes plataformas.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Los creadores de contenidos han tenido que considerar, desde que el cómputo existe, que la piratería es un problema enorme, sobre todo considerando que antes ganaban grandes cantidades de dinero que ya no se ven con facilidad. Hay varias razones para ello: en primera instancia el acceso a la tecnología ha permitido a cualquiera copiar discos compactos de música, de datos y DVDs con películas. Incluso hay posibilidades de hacerse de aparatos para copiar cartuchos de juegos para las diferentes plataformas que los usan.
¿Qué hacer? Yo era de la opinión de que estábamos en el momento de cambiar de modelo de negocios. Las empresas que crean contenidos estaban siendo orilladas a pensar otra manera de hacer dinero pues ya la música está disponible en un sinfín de sitios (vamos, hasta en los tianguis), todo gracias a la revolución en la compresión de datos conocida comúnmente como mp3 y la facilidad para adquirir medios magnéticos para guardar la información digital.
Sin embargo, dos tecnologías emergieron y aparentemente estaban inmunes a la piratería: el Kindle de Amazon.com y Zeebo, una nueva consola de videojuegos. Por ejemplo, el Kindle es un dispositivo que permite leer libros en formato electrónico propietario de Amazon. El lector electrónico, que tiene una pantalla de alta resolución en blanco y negro (tinta electrónica le dicen), permite a los usuarios comprar libros en ese formato y recibirlos por una red inalámbrica. Así entonces, uno compra el libro que le interesa y en un par de minutos ya puede leerlo en el Kindle, que a todo esto, acepta cientos de libros en su memoria. Fascinante idea pero más fascinante aún es la dificultad de copiar esa información digital a otros medios.
Amazon ha pensado muy bien su juguete lector y me parece, encontró –al menos temporalmente– la solución a la piratería , la cual es no transportar los contenidos en ningún medio físico. El contenido ahora se transmite por una red inalámbrica al aparato directamente y no se puede copiar ni pasar a ningún otro medio. Desde luego que parte del éxito reside en no hacer público el formato interno de sus libros pues si se conoce éste. Es probable que el sistema de protección deje de funcionar más pronto que tarde.
Por otra parte, la consola de juegos Zeebo acaba de salir, la cual tampoco tiene CDs, DVDs o cartuchos para cargar los juegos. Ahora quien quiera jugar compra el juego y se lo mandan a la memoria del dispositivo lúdico vía la red inalámbrica 3G. De nuevo, el juego, el software pues, está almacenado en la memoria de la consola pero no se puede copiar a medio físico, llámese cinta, CD, DVD, disco duro, etc. De esta manera –quiero creer– las empresas están encontrando un mecanismo que los libra de la piratería.
Desde luego que estos “mecanismos” antipiratería no podrán durar mucho. Recuerdo cuando Philips presentó su tecnología anticopia en los DVDs y antes de que terminara de explicarla ya había un hacker que había crackeado el esquema, haciendo posible copiar los discos digitales.
Los fabricantes de software en general, han encontrado un mecanismo que parece elimina la piratería. Cuando alguien compra el software, se registra con su nombre y clave. El software obliga al usuario estar conectado a Internet y cuando quiere usarse el programa en cuestión, el sistema ve si el registro es válido. Si por alguna razón uno copia el software y se conecta desde otra dirección IP (que el software desconoce), pide las credenciales al usuario. Pero si el software está funcional en la primera máquina, el sistema piratería lo advierte y manda un mensaje diciendo que deshabilitará la app de esa máquina. De esta manera, el programa se puede usar sí, pero solamente en una computadora a la vez.
Me llama la atención por dónde se está moviendo la tecnología para combatir la piratería. Por un tiempo funcionará, sin duda, y será un buen momento para que muchos fabricantes se adhieran a estos esquemas. Sigo pensando, sin embargo, que tarde o temprano esta solución será temporal porque finalmente, cuando alguien se hace de algún contenido digital, éste se encuentra almacenado (inevitablemente), en memoria física y sí ahí está, entonces seguramente se puede copiar. Sólo falta un ingenioso con mucho tiempo libre para que dé con la solución.