Hay Festival Querétaro
Diego Luna y Diego del Río sobre el teatro, el cine, halagos... ¿y el activismo?
Aunque el público agradeció con lleno total la conversación en el Teatro de la Ciudad dentro del Hay Festival Querétaro, el diálogo dejó temas al aire.QUERÉTARO, Qro. (apro).- Una de las presentaciones más esperadas del “Hay Festival” fue la de Diego Luna en conversación con Diego del Río.
Sin embargo, aunque el público lo agradeció con lleno total en el Teatro de la Ciudad, el diálogo dejó temas al aire que se pudieron haber aprovechado.
El acto que fue anunciado en el marco del ciclo ‘Constelaciones’ (pláticas inter-generacionales) del Hay Festival Querétaro para conmemorar el 10 aniversario del encuentro se destacó en programación sobre el activismo, pero hubo nula conversación sobre el tema.
Ello, a pesar de que Diego Luna fue figura en las noticias de Estados Unidos en junio pasado al dar un significativo speech en “Jimmy Kimmel Live!” que puso en jaque las políticas antiinmigratorias de ese país, y cuya conversación –se dice– llegó hasta La Casa Blanca.
En el encuentro Luna inició recordando cómo conoció a su tocayo, Diego del Río, director teatral y cinematográfico, a quien describió como prodigioso y acertado en visión y forma de trabajo respecto al montaje "Un tranvía llamado deseo" –protagonizado por la actriz nominada al Óscar, Marina de Tavira, a su vez pareja del ‘charolastra’– y la cinta "Todo el silencio” que recibió cuatro Premios Ariel en 2024 incluyendo ‘Ópera Prima’.
En respuesta, Del Río contestó con halagos al actor y director de 45 años, cuya meteórica carrera se ha desarrollado las últimas dos décadas en Estados Unidos, y de manera reciente con buenas críticas al interpretar a Casian Andor en el universo multimillonario y hollywoodense de Star Wars (La Guerra de las Galaxias), cuya serie ‘Andor’ obtuvo cuatro premios Emmy este año.
El tema es que de una hora de diálogo la primera media hora resultó en una constelación de halagos mutuos entre ‘los Diego’, mientras Javier Lafuente –periodista español de El País– anunciado como moderador– tomó el papel de mero espectador. Los otros 20 minutos de la charla fueron preguntas-respuestas con el público.
De lo rescatable del encuentro es que Luna recordó a su padre Alejandro Luna, reconocido escenógrafo nacional, con quien encontró una liga de conversación padre-hijo a través del arte y el teatro:
“Era más fácil hablar con mi papá del teatro que de futbol, entendí que el proceso creativo llevaba reflexión, y a través de un equipo de trabajo (artístico) me cuestioné la vida como persona, ciudadano y luego como creativo”.
Mientas que Del Río afirmó ser un amante del teatro, de la sensación de tocar todas las áreas de este y la experiencia amorosa que ello conlleva, “lo que para el cine son tres minutos para el teatro es un reto diario, por eso me siento adicto al teatro porque es como la vida que está pasando, tienes la experiencia de estar al frente y estás vivo”.
Hacia el final, ya en la ronda de preguntas y respuestas, a Diego Luna no le quedó de otra más que contestar que no creía en Dios, y a un joven admirador de su trabajo por la serie ‘Andor’ respondió –de manera general– sobre cómo encarar las problemáticas en México:
“Hay que vivir con curiosidad, la indiferencia es la enfermedad más grave y más peligrosa, la curiosidad por siempre estar informado, saber lo que está pasando y por qué; la responsabilidad ciudadana es la única respuesta, y tiene que ver con ser curioso con cuestionar las cosas y preguntarse también por el otro, eso me lo enseñó el teatro, pues como la vida no puede pasarnos solos, no pierdas la curiosidad por el otro”.
El diálogo completo –como algunos otros seleccionados de este año– fue transmitido en línea y se puede consultar en: www.hayfestival/queretaro/inicio.