"Ayudar a los niños pobres", el sueño interrumpido de Fátima
“Para Fátima, con cariño. No te preocupes porque el que te hizo daño lo pagara tarde o temprano se te ara gusticia” (sic), dice una carta que, junto con un dulce, dejó una compañera de clase en un altar improvisado afuera de la escuela Enrique C. Rébsamen a la niña de siete años que fue secuestrada, abusada sexualmente y asesinada en la alcaldía Xochimilco.