El Hospital de Jesús, el más antiguo del continente americano, cumplió 500 años, y la celebración incluyó diálogos que se extenderán hasta 2025, pues requiere 200 millones de pesos para equipo médico o dejará de existir. 

Eso sin contar que su templo contiguo -que resguarda el portentoso Apocalipsis de José Clemente Orozco en su bóveda, considerada por algunos críticos como su obra suprema-, carece del histórico remate en la torre: una escultura de Miguel Arcángel que fue retirada hace 13 años y se creía representar a Hernán Cortés.

En el acto conmemorativo del 13 de noviembre, el primer piso?del inmueble congregó a unas 80 personas invitadas para una discreta conferencia de prensa, entre personal del lugar, alumnado y periodistas. Se trató de un repaso amplio y general de la historia del nosocomio, el tercero más antiguo a nivel mundial, fundado en 1524 por Cortés para conmemorar el histórico “encuentro” que tuvo en ese lugar con el tlatoani azteca Mohtecuzoma II.

Se recordó ahí el hecho de que en el siglo XIX sufriera una de sus crisis más severas a raíz de la cancelación del subsidio de Cortés, cuando a sus descendientes les retiraron el Marquesado del Valle de Oaxaca. Desde entonces el hospital ha vivido de la asistencia pública y sus autogenerados mediante citas, consultas y estudios a bajo costo. 

En la conmemoración se encontraron Oscar Lewis Mertz Río, director general del Patronato Colegio San Ignacio de Loyola Vizcaínas; José Antonio Palacios Pérez, presidente del patronato Nacional Monte de Piedad; Octavio Rosales Serafín, presidente del patronato del Hospital de Jesús; y José Narro Robles, exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), exsecretario de Salud y asesor del Comité conmemorativo de los cinco siglos. 

Sin embargo, ninguno de ellos hizo referencia a la necesidad de actualización del hospital, como sucedió en el diálogo previo para anunciar la conferencia por los 500 años, donde se advirtió la necesidad de inversión para aparatos y tecnología médica por la cantidad mencionada. 

Narro Robles sólo dedicó sus palabras a la figura y labor del médico Julián Gascón Mercado (1925-2024), exgobernador de Nayarit, fundador de la Universidad Autónoma de Nayarit y expatrono del Hospital de Jesús. 

En el intermedio, dejó el acto, y abordado por la prensa en relación a su labor como asesor de la Comisión Conmemorativa, respondió a Proceso sobre la necesidad económica: 

“El patronato tiene que ver formas y la sociedad tiene que responder”. 

–¿Algún llamado específico a un sector de la sociedad? 

–Es un llamado a todos los sectores de la sociedad, particularmente a quienes tienen la capacidad. Esta es una institución de quinientos años, aquí está parte de la historia de México y su desarrollo, desde los pueblos originarios al mestizaje, y al momento de la actualidad. El nuestro es un gran país que tiene problemas, uno de ellos es en el campo de la salud, y ésta es una institución importante para la salud, tenemos que ayudar todos. 

El sistema público de salud está muy lastimado, tengo la confianza en que el doctor David Khershenovish (nombrado secretario de Salud para el sexenio de la presidenta Claudia Sheinbaum) sacará adelante la tarea. Todos tenemos que hacer un esfuerzo, aportar para que en algunos años tengamos mejores servicios... 

Fragmento del texto publicado en la edición 0018 de la revista Proceso, correspondiente a diciembre de 2024, cuyo ejemplar digital puede adquirirse en este enlace.