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Alejandra del Moral: Una candidatura entre frenar a Morena o enterrar al PRI
Con una carrera política que no se puede explicar sin el Grupo Atlacomulco y el visto bueno del expresidente Enrique Peña Nieto, Alejandra del Moral, candidata de la coalición Va por el Estado de México, formada por PRI, PAN y PRD, tiene el desafío de retener para su partido la gubernatura.Con una carrera política que no se puede explicar sin el Grupo Atlacomulco y el visto bueno del expresidente Enrique Peña Nieto, Alejandra del Moral, candidata de la coalición Va por el Estado de México, formada por PRI, PAN y PRD, tiene el desafío de retener para su partido la gubernatura en los comicios del 4 de junio próximo, lo que representaría una gran bocanada de oxígeno para las aspiraciones políticas del PRI y un dique contra Morena rumbo a 2024.
TOLUCA, Edomex (Proceso).– Candidata a la gubernatura del Estado de México por PRI, PAN, PRD y Nueva Alianza, Alejandra del Moral se ubica como la protagonista de la sobrevivencia o extinción del PRI. Ella podría ser la figura que pondrá un dique al avance de Morena o la que recibirá la última estocada al partido que dominó la vida política de México durante casi un siglo.
Aunque ahora encabeza la alianza opositora al movimiento del presidente Andrés Manuel López Obrador, el despunte y crecimiento de la carrera política de Del Moral no se explica sin la existencia del grupo Atlacomulco y, particularmente, sin el visto bueno del expresidente Enrique Peña Nieto.
Desde el templete, en innumerables ocasiones ha destacado que es importante gobernar más allá de colores y se define como una suerte de candidata ciudadana o de la sociedad. Un discurso en el que descarta renegar de su militancia en el PRI, ofrece “gobernar para todos” y reitera su intención de convertirse en la primera mujer al frente del gobierno del Estado de México, entidad que el partido casi centenario está en riesgo de perder como bastión.
Nacida en Cuautitlán Izcalli hace 38 años, Alejandra del Moral es hechura de un ya disminuido Grupo Atlacomulco que vivió sus mejores años en la época del profesor Hank González y del que desde los cuarenta del siglo pasado salieron siete gobernadores, incluidos el abuelo y el padre del actual mandatario estatal, Alfredo del Mazo Maza.
Motivada por la militancia de su padre Ismael del Moral, en 1999, cuando sólo tenía 16 años se adhirió al PRI, que en marzo pasado cumplió 95 años.
Su esposo también tiene ascendencia en el PRI; es el diputado Mariano González Aguirre, hijo de Mariano González Zarur, exgobernador de Tlaxcala, y de la actriz Hilda Aguirre.
Abogada por la Universidad Iberoamericana y maestra en Administración Pública por el Tecnológico de Monterrey, durante la campaña ha cargado su pesada ascendencia priista, pese al apoyo del PAN y PRD, sus no tan viejos oponentes.
En 2006, con Peña Nieto ya como gobernador, fue postulada como candidata a diputada local, cargo que no alcanzó, pero tras ese revés se convirtió en directora de Relaciones Internacionales del gobierno del Estado de México, después fue consejera política municipal, dirigente estatal de mujeres jóvenes, y luego consejera nacional de su partido.
La abanderada, sin embargo, omite hablar del expresidente autoexiliado en España y se muestra incómoda cuando se le cuestiona sobre él. Reconoce que ella comenzó en la política cuando Peña era gobernador, como dirigente de mujeres jóvenes del PRI, y dice recordarlo “como un buen gobernador, un gobernador cercano”, pero niega tener con él una relación más estrecha y asegura que no le ha llamado antes o durante la campaña, ni siquiera para felicitarla por la candidatura.
“No he tenido comunicación con él”, ha dicho.
En 2009, todavía en la administración estatal de Peña Nieto, a sus 25 años Alejandra del Moral fue designada candidata a la presidencia municipal de su natal Cuautitlán Izcalli, alcaldía que recuperó para el tricolor y que llevaba 12 años en poder del PAN, lo que la convirtió en la mujer más joven de la entidad en asumir un cargo de esa naturaleza.
De esa encomienda enlista como su principal logro la reestructuración de la deuda pública, que para entonces ascendía a dos mil millones de pesos y colocaba al ayuntamiento como el más endeudado del Estado de México. La reestructura financiera ocurrió de la mano de Luis Videgaray, entonces secretario de Finanzas de la entidad, quien hizo del refinanciamiento de pasivos una práctica común del erario.
Cuando Enrique Peña participó como candidato presidencial, Alejandra Del Moral fue postulada a la diputación federal; ambos ganaron. Desde la tribuna parlamentaria, el 12 de diciembre de 2013, la priista defendió las bondades de la reforma energética impulsada por el mandatario.
Bajo la tutela del presidente, en 2015 Del Moral se convirtió en directora del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi), ahora Banco de Bienestar. Y luego se reintegró a la administración pública estatal para convertirse en secretaria del Trabajo y secretaria de Desarrollo Económico en el sexenio de Eruviel Ávila.