LOS ÁNGELES (proceso.com.mx).- El líder espiritual de la Iglesia La Luz del Mundo Naasón Joaquín García fue detenido el 3 de junio pasado por la Procuraduría del Estado de California en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles. El arresto se dio gracias a una pista colocada en una página en internet para denunciar abusos cometidos por clérigos.
La pista dio cuenta de una serie de abusos y actos lujuriosos presuntamente cometidos por el llamado “apóstol de Jesucristo” contra menores de edad. De acuerdo con
información recabada por la fiscalía, esos delitos se perpetraron entre 2015 y 2018 en el condado de Los Ángeles.
La denuncia presentada por el procurador general Xavier Becerra ante la mencionada Corte describe pormenores de los hechos que sustentan los 26 cargos contra el líder de una de las congregaciones religiosas con más seguidores en el mundo. Las acusaciones incluyen violación, producción y distribución de pornografía infantil, tráfico humano con propósitos sexuales, conspiración y extorsión.
La fiscalía sostiene que Naasón contaba con la complicidad de tres mujeres para cometer los delitos: Alondra Ocampo y Susana Medina Oaxaca, que fueron arrestadas junto con el líder religioso, mientras que Azalea Meléndez Rangel está prófuga.
La mecánica del abuso es similar, de acuerdo con el expediente acusatorio, en los casos que documenta la fiscalía. Por ejemplo, entre el 1 de agosto de 2017 y febrero de 2018, Joaquín García y Ocampo supuestamente incitaron a una menor de 15 años a realizar actos lujuriosos para excitarse y satisfacer sus deseos sexuales. A la menor, identificada como Jane Doe 1, se le pidió que bailara con poca ropa y seductoramente para Joaquín García.
Siempre según las imputaciones de la fiscalía, esa vez Ocampo le dijo a la niña y a otras menores que si se oponían a los deseos del “apóstol” estarían actuando contra Dios. Él les habló también sobre un rey que tenía amantes y les dijo que un apóstol de Dios no puede ser juzgado por sus acciones.
En otra ocasión Ocampo supuestamente llevó a la misma víctima a la oficina de Joaquín García y le pidió que se quitara el vestido. Entonces la abrazó, la besó en los labios, le tocó el trasero e intentó tocar su vagina.
Joaquín García y Ocampo también son acusados de violar a otra menor, identificada como Jane Doe 2, y de obligarla a tener sexo oral. “Los acusados causaron gran daño físico a Jane Doe 2”, dice el documento de la fiscalía.
En un delito similar, cometido contra “Jane Doe 3”, participó la tercera acusada en el caso, Susana Medina Oaxaca.
“Este caso va más allá de un incidente de abuso”, dijo el procurador Xavier Becerra al anunciar el arresto de Joaquín García. Y añadió: “Tenemos cuatro personas que son víctimas, que nos han dado información, pero creemos que hay mas víctimas de la criminalidad del señor García”.
Respecto al cargo de producción de pornografía, la fiscalía recopiló testimonios según los cuales entre el 1 de agosto y el 30 de abril de 2018 Ocampo envió a Jane Doe 1, 2 y 3 mensajes en los que afirmó que “el siervo de Dios” estaría muy feliz si ellas le enviaban fotos donde aparecieran desnudas.
“Alondra Ocampo envió un mensaje a Jane Doe 1, Jane Doe 2 y Jane Doe 3 pidiéndoles que se tomaran las fotos sin ropa interior y con las piernas abiertas, y se las enviaran a ella”, dice la demanda. En otra ocasión, Ocampo llevó a las niñas a un edificio, les dio uniformes escolares y les pidió que se tocaran los senos y el trasero, así como entre ellas, mientras les tomaba fotos. Esto se repitió en distintas fechas y locaciones. Las fotografías se le enviaron a Joaquín García.
La demanda de la fiscalía refiere que una cuarta persona, identificada como Jane Doe 4, fue víctima de violación y obligada por Joaquín García y Azalea Meléndez Rangel a tener sexo oral; estos dos delitos ocurrieron entre el 1 de junio y el 30 de julio de 2015. Dos años después, entre marzo y septiembre de 2017, la víctima habría sido violada y extorsionada nuevamente por Joaquín García.
Para el procurador Becerra, el arresto del líder de La Luz del Mundo representa un éxito en su propósito de desmantelar las redes de tráfico humano y abuso sexual. “California es el centro de tráfico humano en el país –explicó–. Hay más de mil 300 casos reportados aquí en California en 2017 y sabemos que hay muchos que no son reportados. Por eso este caso es tan importante”.
Fragmento del texto que se publicó el 16 de junio de 2019 en la edición 2224 de la revista Proceso