Computación
¿Por qué Linux no es un sistema operativo tan popular?
Es un sistema operativo basado en el trabajo de Ken Thompsos en los Laboratorios Bell, el cual junto con Dennis Ritchie y un importante grupo de programadores de esta empresa, escribió Unix, que es en realidad un “hack” de Multics, un sistema operativo multitareas y multi-usuarios.CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).-Hoy existen, en el mercado, básicamente tres sistemas operativos: Windows, MacOS X y Linux. El primero lo hace Microsoft y está instalado en algo así como el 75% de todas las computadoras. Le sigue MacOS X con 14.5% y Linux con 2.79%. Otros sistemas menos usados: Chrome OS y otros no llegan al 7%. MacOS X no tiene tanta aceptación y no es porque el sistema operativo tenga problemas. La cuestión es que es un sistema operativo propietario, el cual solamente usarse en equipos Apple. Por ello su participación está limitada. Apple ha apostado a un selecto grupo de usuarios de computadoras, que han sido evangelizados por la marca (así se dice en general), y son fieles a la misma, pase lo que pase.
Windows, en cambio, es el gigante de los sistemas operativos y tienen un largo camino recorrido. Se puede decir que desde la versión 7 a la 11, Windows ya ha madurado y la última versión se ve francamente muy pulida y bien escrita. El único problema es que los requerimientos de hardware para Windows 11 exceden la mayoría de los equipos, asunto que eventualmente con el tiempo se superará. Este 75% de participación en el mercado ha permitido que muchas empresas ajenas a Microsoft, escriban software para esta plataforma y es hoy por hoy, el sistema con más software en el planeta (considerando código abierto, código propietario, shareware, etcétera).
¿Y Linux? Es un sistema operativo basado en el trabajo de Ken Thompsos en los Laboratorios Bell, el cual junto con Dennis Ritchie y un importante grupo de programadores de esta empresa, escribió Unix, que es en realidad un “hack” de Multics, un sistema operativo multitareas y multi-usuarios que se usaba a finales de los años 60s. Unix eventualmente pasó de ser una serie de rutinas a un sistema operativo completo. Thompson originalmente regalaba -literalmente- Unix, pero eventualmente los jerarcas de AT&T (el actual dueño de lo que fue los Laboratorios Bell), decidieron que el sistema podría ser vendido a compañías de todo tipo.
Sin embargo, unos 25 años después aparecería Linus Torvalds, un estudiante de ciencias de la computación de la Universidad de Helsinki, quien desarrolló un sistema operativo basado en Unix y que era de código abierto. El sistema estaba inspirado en Minix, un sistema operativo basado en Unix y escrito por Tanenbaum. El nombre de Linux fue dado por el propio Torvalds, quien le cambió la S final por X y como la semejanza con Unix era clara, lo dejó así, a pesar de que hoy en día hay miles de programadores que colaboran en este proyecto.
Curiosamente Linus Torvalds escribió en un foro lo siguiente: “Estoy haciendo un sistema operativo (gratuito, solo un pasatiempo, no será nada grande ni profesional como GNU) para clones AT 386(486). Llevo en ello desde abril y está empezando a estar listo. Me gustaría saber su opinión sobre las cosas que les gustan o disgustan en minix, ya que mi SO tiene algún parecido con él.[...] Actualmente he portado bash(1.08) y gcc(1.40), y parece que las cosas funcionan. Esto implica que tendré algo práctico dentro de unos meses...” Sin duda nunca imaginó que unos 40 años después sus ideas siguen estando vigentes y hay un número grande de diversas versiones de Linux,
Pero a pesar de todo el trabajo hecho en Linux, no parece haber brincado al escritorio del usuario final, aquel que no necesariamente sabe programar o que sabe de ceros y unos, lógica booleana, etcétera. Si uno ve por ejemplo, esfuerzos como Ubuntu, Debian, Mandrake, entre tantas distribuciones que hay de Linux, notará que todas ellas tienen una interfaz tan manejable como la de Windows o MacOS X. ¿Dónde está el problema? ¿Por qué sigue sin tomar por asalto a la competencia en el rubro de sistemas operativos?
Aparentemente hay dos grandes “peros” que hacen que Linux no se instale en más computadoras, aunque cabe decir que en lo que se refiere a servidores, Linux tiene más instalaciones que cualquier otra empresa, incluso Microsoft. Sin embargo, en el usuario final, el problema es que por una parte, la instalación de los paquetes de software en un sistema Linux no es tan simple como en Windows. Tal vez la razón es que sigue pareciendo críptica al usuario final y no está claro si los paquetes se instalaron correctamente o no. Vamos, que la curva de aprendizaje en este tema de instalar nuevo software en Linux es más complicada que en Windows.
Pero esto no es todo. El segundo “pero” vendría ser la distribución de los paquetes de software más usados en el mundo. Por ejemplo, yo tengo una Raspberry Pi 400, es una computadora con tarjeta Raspberry Pi integrada con un teclado de bajo costo. El sistema operativo de la Pi contiene las herramientas y software de productividad, así como juegos, herramientas de programación, etcétera, todos de acceso libre y podría asegurar que el 99% de dichas aplicaciones son de código abierto. Por ejemplo, tiene el equivalente a Microsoft Office, llamado Libre Office, que en términos reales podría sustituir a la herramienta informática de Microsoft e incluso, la misma permite guardar archivos en el formato de la empresa de las ventanas. Sin embargo, cuando pasamos nuestros archivos a MsOffice, hay que hacer ligerosn cambios, nada terrible, pero quita tiempo. Y sí, hace la tarea de reemplazar a Office de Microsoft, pero algo le falta, que hace que el usuario que eventualmente tenga que migrar sus archivos a Windows, tenga ligeros inconvenientes y esto quita tiempo de productividad.
Un problema más es la falta de software. Por ejemplo, no existe versión de Photoshop para Linux, aunque bien podría instalarse un emulador como WinE (Windows emulator), y correrlo así, pero eso se sale muchas veces de las características del usuario de computadora, que simplemente no quiere ni tiene porqué entender cómo instalar el emulador de Windows en Linux para correr software de PC. Pero desde luego, no es el único programa que está en MacOS y Windows. Hay mucho software comercial que no tiene versión Linux y esto es un gran “pero” al final del día. Los problemas mencionados no necesariamente se pueden resolver fácilmente. Por ejemplo, existe GIMP para Linux, que podría sustituir a Photoshop en la mayoría de los casos, aunque la herramienta de Adobe es sin duda extremadamente poderosa (y costosa). Y así podríamos hablar de muchos paquetes que no están en Linux.
Si usted programa en Delphi, que es una herramienta poderosa para crear aplicaciones en Windows, podría echar un vistazo a Lazarus, que parece tener la misma interfaz, en mismo “look & feel”, etcétera. No obstante esto, en pruebas hechas por el autor de este artículo, encontramos que el depurador de Lazarus (debugger), es malísimo e inservible en términos generales. La cantidad de componentes escritos para Lazaruses mínima y los que han sido escritos para Delphi muchas veces no se pueden ejecutar en Lazarus. Así que esto nos hace desechar Linux y regresar a Windows, que no será perfecto, pero no me mete en tantos problemas.
Soy de la opinión que cuando las empresas que hacen software empiecen a ver más viabilidad a Linux, más usuarios, más participación de mercado, entonces empezará a repuntar y de un 3% podrían bien subir como la espuma. Pero para ello se requiere trabajo en muchos frentes y además, de convence a los usuarios de los otros sistemas operativos, a que le den una probadita a Linux. La realidad es que es un sistema operativo muy bien escrito y merce una mejor oportunidad en este mundo del cómputo.