Bolivia
México llama al secretario de la OEA a evitar confrontaciones con el gobierno de Bolivia
El gobierno de México pidió al secretario general de la OEA que se abstenga de "realizar pronunciamientos unilaterales a nombre de toda la membresía" respecto a la detención de la expresidenta Jeanine Áñez.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- En respaldo a la detención y al futuro juicio de la autoproclamada expresidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, quien tomó el poder a raíz del golpe militar contra Evo Morales, el gobierno mexicano pidió a Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), que se abstenga de “realizar pronunciamientos unilaterales a nombre de toda la membresía”.
En un boletín, la Cancillería mexicana expresó su “llamado” a Almagro para “evitar confrontarse con un gobierno electo democráticamente como lo es el de Bolivia”, en referencia a las críticas que se hicieron en los últimos dos días el gobierno del país sudamericano y la Secretaría General de la OEA.
El pasado lunes 15 , en reacción a la captura de Áñez, el equipo de Almagro difundió un comunicado donde denunció que el Movimiento Al Socialismo (MAS), que regresó al poder por las urnas después del golpe militar, está concretando sus “amenazas” de “persecución judicial a políticos opositores”, y defendió la necesidad de conformar una comisión que investigue casos de corrupción perpetrados durante el gobierno de Evo Morales y el “de transición”, un eufemismo para calificar al gobierno golpista encabezado por Áñez.
En el documento, el equipo de Almagro afirmó: “el sistema judicial boliviano no está en condiciones de brindar las mínimas garantías de juicio justo, de imparcialidad y de debido proceso, debido a problemas de estructura y en particular de su integración”.
En respuesta, La Paz emitió su propio boletín, en el que despotricó contra Almagro, a quien acusó de participar y apoyar el golpe militar, que se concretó horas después de la publicación de un informe de la OEA sobre presuntas irregularidades detectadas en el proceso electoral, mismas que fueron desmentidas posteriormente.
Es más, el gobierno boliviano anunció que estudia la posibilidad de iniciar acciones legales contra Almagro por sus “persistentes acciones de injerencia” y porque sus acciones “costaron vidas humanas”, por las cuales “debe rendir cuentas”; Evo Morales incluso señaló que Almagro fue culpable de crímenes de lesa humanidad.
Hoy, la Secretaría General de la OEA mandó un nuevo comunicado, bastante extenso, donde repudió el “tono represivo y amenazante” de La Paz y calificó de “inadmisibles” los “juicios emitidos respecto a la autoridad moral y ética” de la Cancillería boliviana.
El equipo de Almagro expresó nuevamente su respaldo al informe de la Misión de Observación Electoral (MOE) que llevó a la cúpula militar boliviana a derrocar Morales, y aseveró: “es verdaderamente inaceptable y repudiable pretender que esos informes hayan generado violencia y convulsión social”, pues “la violencia y convulsión social ya estaba instalada en el país en forma inmediata al acto eleccionario del 19 de octubre de 2019”.
El gobierno mexicano, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), salió en defensa del gobierno boliviano, y por enésima vez criticó a Almagro, como lo hizo en el seno de la OEA y cuando se opuso a la reelección del uruguayo al frente del organismo internacional.
En un boletín emitido por la tarde, la Cancillería deploró: “el comunicado C-024/21 (publicado hoy por la OEA) sienta un peligroso precedente para una Organización creada con el propósito de buscar el consenso”, y recordó a Almagro que “la Secretaría General debe atender la naturaleza colegiada de su mandato y, en concordancia con el derecho internacional, no debe intervenir en los asuntos internos de los Estados miembros de la OEA”.