Avión
El capitán Roger Alonso Castillo salva 215 vidas tras falla de avión de Viva Aerobus
El avión, con destino de Miami a Mérida, presentó un problema crítico en uno de sus motores mientras se encontraba en el aire.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El pasado 6 de mayo, la tripulación del vuelo VB755 (de Miami a Mérida) detectó y reportó un problema crítico en uno de los motores del avión mientras se encontraban en aire. El capitán, Roger Alonso Castillo Rivas, decidió apagar el motor, maniobra que evitó que el propulsor se incendiara o provocara daños mayores.
Castillo también informó a la torre de control que se desviaría de la ruta original, para realizar un aterrizaje de emergencia en el Aeropuerto Internacional José Martí, en La Habana, Cuba.
“En el ámbito profesional es la primera vez que me toca una emergencia como esta. Anteriormente sí habíamos tenido, en la universidad, un par de situaciones, pero profesionalmente esta ha sido la única y esperemos que sea la última también”, dijo Castillo en entrevista a Tv Azteca.
Lo primero que destacó es que la falla de un motor de avión es tan improbable que “por estadística, necesitas ocho vidas laborales para tener una emergencia como esta. Es cero común” en la aviación.
—¿Qué pasó en ese momento? ¿Qué reacción tuviste cuando ves que el motor falló?, le cuestionaron.
—Tuvimos una falla en una parte del motor, no en todo el motor, en una parte en específica. Por procedimiento, tenemos que apagar el motor, precisamente para evitar daños a la aeronave y que se pueda convertir en una tragedia.
—¿Se daña parte el motor y se sintió eh en el avión completo?, le preguntaron.
—No se siente. Nosotros en cabina tenemos indicadores que nos dicen que algo está mal, pero como tal que tú lo sientas no. El avión se comporta perfectamente con un solo motor, al grado que los pasajeros decían que no sintieron cuando se apagó el motor.
—¿Cómo lo viviste?
—Nosotros conocemos este efecto como ‘startup effect’, que es el tiempo que tu cerebro tarda en procesar la información. Entonces, cuando nosotros apagamos el motor y la velocidad del del avión empieza a caer, ¡uf! (…) De primera instancia es un poco de parálisis, dura pocos segundos, después entras en un estado muy alerta y cuando controlas todo, ahí sí hay un pequeño espacio para el miedo.
—¿Ustedes tienen la obligación de comunicarles (a los pasajeros) que algo estaba pasando?
—Sí, es parte de nuestro procedimiento informarles.
El capitán Roger Alonso Castillo Rivas detalló que informó a los pasajeros sobre el incidente una vez que la emergencia estaba bajo control y estaban a próximos a aterrizar.
“Evidentemente (los pasajeros) se dan cuenta que algo no está bien, que donde estamos aterrizando no era Mérida. Entonces, sí les informamos, pero fue cuando se controló la situación. En el momento, tú estás concentrado en la falla”, señaló.
Y agregó que el trabajo de toda la tripulación durante la emergencia aérea. “Toda la tripulación hicimos un buen trabajo. Los resultados están en que gracias a Dios pudimos aterrizar el avión con éxito en La Habana”. aseguró.
El capitán Roger Alonso Castillo recibió el reconocimiento “Valor Meridano”
Cecilia Patrón Laviada, alcaldesa de Mérida, otorgó un reconocimiento al capitán Castillo, “quien demostró temple, pericia y gran profesionalismo al tomar una decisión crucial que evitó una tragedia”.
??Hoy entregamos la distinción “Valor Meridano” al Capitán Roger Alonso Castillo Rivas, quien demostró temple, pericia y gran profesionalismo al tomar una decisión crucial que evitó una tragedia.
Durante un vuelo a Mérida, tuvo que aterrizar en el Aeropuerto Internacional José… pic.twitter.com/2iQepW2MaM — Cecilia Patrón Laviada (@CeciliaPatronL) June 18, 2025