CHILPANCINGO, Gro. (apro).- La suspensión del transporte público por los asesinatos y amenazas contra conductores por el crimen organizado se extendió a Taxco, en la región norte. Esto provocó el cierre de escuelas este lunes 22 de enero.

En Acapulco, el servicio no se ha restablecido en su totalidad en 10 días y este fin de semana otros dos conductores fueron asesinados.

Reportes policiacos indican que a las 18:30 horas del sábado 20 de enero en la calle Benito Juárez en Taxco, cerca del Palacio Municipal, sujetos balearon al chofer de una combi de la ruta Cadena-Zócalo, cuando este estaba trabajando. El joven identificado como Jesús murió camino a recibir atención médica. En el ataque resultó lesionada una joven pasajera.

Este crimen orilló a que conductores y transportistas suspendieran el servicio el domingo 21 de enero como medida de seguridad y protesta ante el abandono de las autoridades.

La medida se difundió por WhatsApp

“Buenas tardes, compañeros ya la situación se complicó desactiven todos los puntos, resguarden sus unidades, no las dejen en las calles porque carro que vean carro que quemarán.

“Por favor, guárdense, de momento no les puedo dar más información, por acuerdo de representantes de las uniones se va a parar el transporte hasta nuevo aviso”.

Los transportistas son acosados por los grupos criminales de La Familia Michoacana y Los Tlacos o Federación Guerrerense, denunciaron usuarios en redes sociales.

La tarde y noche del domingo, escuelas de nivel básico notificaron a padres y alumnos la suspensión de clases este lunes 22 de enero:

“A la comunidad escolar se les informa que debido a la situación de falta de transporte en la ciudad de Taxco de Alarcón y tomando en cuenta que muchos de ustedes se trasladan desde áreas dispersas y alejadas de la ciudad, se ha optado suspender las clases mañana lunes 22 de enero”, informó la dirección y comité de padres de la primaria Juan Ruiz de Alarcón.

La ciudad platera amaneció sin transporte público y las escuelas de nivel básico y medio superior cerraron sus puertas.

Hasta el momento, ningún representante de instituciones de seguridad ni el alcalde de Taxco, Mario Figueroa; ni la gobernadora, Evelyn Salgado, se han pronunciado acerca de los crímenes, secuestros, extorsiones y amenazas que padece el comercio, transporte y ciudadanía de este destino turístico.