Puebla

Caso Minerva Calderón: Seis años sin que la fiscalía de Puebla detenga al feminicida

La abogada Minerva Calderón, de 28 años de edad, fue asesinada la tarde del 21 de marzo de 2017 en el interior de la casa que habitaba en la colonia San José Vista Hermosa.  
miércoles, 22 de marzo de 2023 · 20:57

PUEBLA, Pue., (apro).- Marcos Calderón y Minerva Hernández reprocharon a la Fiscalía de Puebla que, a seis años del feminicidio de la hija de ambos, Minerva Calderón, aún no puedan detener a José Rodrigo Vázquez Barrientos, quien está identificado como el asesino desde el 21 de marzo de 2017, mismo día que ocurrieron los hechos.  

“En el caso de mi hija no sé por qué no han avanzado si tenemos información desde que sucedió el hecho de que está plenamente identificado el autor del asesinato que es José Rodrigo Vázquez Barrientos”, señaló Marcos Calderón, quien mencionó que cada que viajan desde Durango, de donde son originarios, para pedir informes sobre el caso, la Fiscalía poblana siempre les reporta cero avances.  

Recordó que incluso en la carpeta de investigación está asentado que el padre de José Rodrigo, quien es doctor, lo llevó el día del feminicidio al hospital Los Ángeles de Puebla para que le curaran una herida que tenía en una de sus manos y que, desde ahí, le facilitarle la fuga para que el autor del crimen no pudiera ser aprehendido.  

“Desde ese momento vemos que hubo corrupción, manipuleo y protección, desgraciadamente está asociado con dinero, nosotros seguimos insistiendo que, si ya está identificado el culpable, la fiscalía debe de trabajar para localizarlo y aprehender al responsable”, reclamó.  

En tanto que Minerva Hernández recalcó que habría elementos para ubicar al feminicida de su hija, pues además de que los padres de esa persona siguen radicando y trabajando en Puebla, tienen conocimiento que José Rodrigo nunca fue económicamente autosuficiente, por lo que debe estar recibiendo -con más razón ahora- apoyo económico de su familia para sobrevivir.   

Señaló que la Fiscalía General de Puebla cuenta con los recursos tecnológicos y con el personal calificado, que han usado para resolver otros casos más complejos que este feminicidio en el que, desde hace seis años está plenamente identificado el responsable.  

“Sin duda alguna hace falta interés y trabajo de la Fiscalía, han resuelto otros casos de mayor dificultad. Nuestra exigencia es la misma que el año pasado, que se haga justicia”, manifestó.  

La abogada Minerva Calderón, de 28 años de edad, fue asesinada la tarde del 21 de marzo de 2017 en el interior de la casa que habitaba en la colonia San José Vista Hermosa.  

Desde ese día, las cámaras de seguridad captaron a José Rodrigo Vázquez Barrientos cuando salía de la casa con manchas de sangre. Sin embargo, se asegura que pudo escapar con la protección de sus padres Margarita Barrientos Pérez y Juan José Vázquez de la Garza, quienes son reconocidos médicos en Puebla y tenían cercanía con el entonces gobernador Rafael Moreno Valle.  

Los padres de Minerva Calderón estuvieron en la Universidad Iberoamericana Puebla, donde además de exigir justicia por este feminicidio, se conmemoró un año de funciones de la Clínica Jurídica que lleva el nombre de la joven abogada, egresada de esta institución.  

Jocelynn Pérez Aldana y Daniela Jiménez Cortés explicaron el trabajo realizado por esta clínica la cual ha brindado acompañamiento y seguimiento en 32 carpetas de investigación en materia de búsqueda de personas desaparecidas y víctimas de desaparición forzada.  

También señalaron que han dado apoyo legal a proyectos como Radio Huayacocotla, a la defensa de tierras de ejidatarios poblanos que se ven asediados por concesiones mineras y a la lucha de comunidades como La Candelaria, en Chiapas, para que se reconozca su derecho al autogobierno y la entrega de recursos para su autogestión. 

Finalmente, la Clínica Jurídica Minerva Calderón también acompaña a las y los investigadores de la comunidad Ibero Puebla “ante tratos diferenciados y discriminatorios que se les han dado por parte del CONACYT, que ha privilegiado a investigadores del sector público por sobre el sector privado”.

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