CIUDAD DE MÉXICO (apro).– El responsable diocesano de la Comisión para la vida, familia, juventud y laicos de la Diócesis de Sinaloa, el presbítero Miguel Ángel Soto Gaxiola, les negó la comunión a los diputados que votaron a favor de despenalizar el aborto en la entidad.

“¿Puede un diputado o cualquier persona que se profese católico, al tiempo que abiertamente coopera o legisla en contra de la vida, recibir la Santa Comunión? No, no puede acercarse a la comunión sacramental, ni puede ser padrino o acompañante de otras personas que quieren recibir otros sacramentos como el bautismo”, señaló en un comunicado.

Esto, indicó, no es en absoluto una sanción eclesiástica, “sino el reconocimiento del estado objetivamente indigno de una persona a recibir la Sagrada Comunión”.

Pese a que el Estado mexicano es laico, Soto Gaxiola exhortó a los diputados que profesan la fe católica “a ser coherentes con su fe” y no renuncien a su “responsabilidad personal de votar a conciencia, argumentando que solo reciben instrucciones o indicaciones de cualquier instancia superior”.

Detalló que, con esto, la Iglesia “no pretende restringir el ámbito de la misericordia”, sino que manifiesta “la gravedad del crimen cometido, el daño irreparable causado al inocente al que se da la muerte, a sus padres y a toda la sociedad”, indicó, citando una “Aclaración de la Congregación para la Doctrina de la Fe sobre el aborto procurado (11.VI.2009)”.

Explicó el objetivo de su comunicado al contar que muchas personas le han preguntado por lo sucedido en el Congreso de Sinaloa el 8 de marzo pasado, Día Internacional de la Mujer, cuando los diputados de Morena, PRI, PT y Movimiento Ciudadano aprobaron la despenalización del aborto.

“Su extrañeza e indignación –indicó el prelado–, los lleva a cuestionarse del hecho resolutivo al que llegaron con su votación. ¿Cómo es posible –me comparten– que haya católicos que reciban la comunión o que se digan participantes de nuestra fe, mientras que, al mismo tiempo, promueven públicamente programas, políticas o legislaciones que violan la ley moral?”, inquirió.

Insistió: “¿Cómo es que un diputado que aprueba el aborto participe en la misa y comulgue?”

Según el cura, hay mucha gente “escandalizada por la traición pública” de los diputados a la Iglesia, a las enseñanzas de la Iglesia sobre la fe y la moral de aquellos legisladores “que se dicen ‘católicos’”.

Para Soto Gaxiola, “la pregunta de los fieles es coherente y tiene sentido”, pues “¿cómo puede acercarse a misa y comulgar un fiel que, abiertamente, promueve y está a favor de políticas contrarias a la vida?”, consideró.

“Lo que declare la Iglesia no nos alcanza”

El presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso de Sinaloa, Feliciano Castro, le dijo a El País: “El mundo de la Iglesia es su mundo y el del Congreso de Sinaloa es otro. Lo que declare la Iglesia no nos alcanza”, y le recomendó al prelado que se dedique al mundo pastoral, a promover el amor al prójimo y no a la intolerancia.

“Solo genera exacerbación social que, además, es infértil, porque en Sinaloa, la gran mayoría respalda las resoluciones del Congreso. Es el derecho de la mujer a decidir libremente sobre su cuerpo”, añadió.