PUEBLA, Pue., (apro).- El fiscal general de Puebla, Gilberto Higuera Bernal, informó que las 10 personas, entre ellas dos menores de edad, que fueron ejecutadas la medianoche del 8 de marzo en Atlixco eran integrantes de una familia originaria de Veracruz que presuntamente se dedicaba a la venta de droga en la zona.

En rueda de prensa, el fiscal precisó que todos los cuerpos que fueron encontrados en el interior de una casa del poblado mágico, presentaban el llamado tiro de gracia en la cabeza.

Agregó que en las últimas horas se han realizado siete cateos en Atlixco, incluido en un negocio de comida rápida, en donde se aseguraron diversas cantidades de la droga de la llamada cristal, básculas, teléfonos celulares, libretas con información de la venta y 11 motocicletas.

En el lugar de la múltiple ejecución, dijo que se encontraron ocho cartuchos útiles calibre 7.62 milímetros, 18 cartuchos percutidos y siete ojivas deformadas, todo calibre 9 milímetros.

Confirmó que entre los muertos se encontraban dos menores de edad: una jovencita y un varón, sin precisar sus edades. 

Higuera Bernal sostuvo que tanto este caso como la reciente ejecución de otras seis personas en Ciudad Serdán, tienen en común que son enfrentamientos y disputas entre bandas dedicadas al narcomenudeo.

Sin embargo, aseguró que las investigaciones de ambos casos ya están adelantaras y que en breve se identificará y procederá contra los responsables.