CHETUMAL, Q. Roo., (apro).- El gobernador Carlos Joaquín González descartó un contexto político en el asesinato del empresario José Darío Sánchez Cordero, cuñado de la alcaldesa de Puerto Morelos, Blanca Merari Tziu Muñoz, perpetrado el 25 de febrero en aquel municipio.

Dijo que están investigando el homicidio y aseguró que es un tema en materia de seguridad y no de índole político. 

José Darío Sánchez Cordero fue asesinado a balazos junto con su hijo de 15 años y uno de sus trabajadores en su Rancho Coctelería La Bestia, ubicado en la delegación Leona Vicario del municipio de Puerto Morelos.

Estos tres homicidios se perpetraron coincidentemente al cumplirse un año del asesinato de Ignacio Sánchez Cordero, esposo de Tziu Muñoz, quien fue ultimado en un restaurante de la cabecera portomorelense el 24 de febrero de 2021, en circunstancias similares y en pleno proceso electoral. 

“Nacho” Sánchez Cordero fue asesinado cuando se desempeñaba como secretario de Desarrollo Social y Turismo en el gobierno municipal que encabezó la entonces alcaldesa verdeecologista Laura Fernández Piña, quien ahora compite por la gubernatura como candidata de la coalición PAN-PRD “Va por Q. Roo”.

Al momento de su muerte “Nacho” Sánchez estaba por ser postulado como candidato a la alcaldía de Puerto Morelos por la coalición “Juntos haremos historia”, pactada entre los partidos Morena-PT-PVEM y Movimiento Auténtico Social (MAS).

La candidatura recayó en su viuda Blanca Merari, quien a la postre ganó el cargo. No obstante, en plena campaña proselitista la ahora alcaldesa fue blanco de dos atentados, por los que el 5 de mayo de 2021 lanzó un video en sus redes sociales en el que dijo temer por su vida. 

El 28 de mayo del año pasado la Fiscalía General de Quintana Roo detuvo a Karla Odethe Vivas Medina, hermana de la excandidata del Partido Encuentro Solidario (PES) a la presidencia municipal de Puerto Morelos, Yazmín Vivas, como presunta autora intelectual del asesinato de “Nacho” Sánchez y de los atentados contra su viuda. 

La tarde del pasado viernes José Darío Sánchez Cordero, su hijo y un trabajador fueron asesinados por desconocidos y, según reveló el fiscal general del estado, Óscar Montes de Oca, el primero había sobrevivido ya a tres atentados que no denunció. Tampoco solicitó la protección de las autoridades.

El funcionario comentó que aparentemente el móvil de estos asesinatos fue una venganza contra José Darío, quien vivía en situación de riesgo, pero evitó entrar en detalles.