MONTERREY, N. L., (apro).- Diputados locales vapulearon con reproches y cuestionamientos al gobernador Jaime Rodríguez durante la presentación de su sexto y último informe de actividades, en el que él había presentado sólo noticias positivas de la entidad.

Fue la presidenta del Congreso, la priista Ivonne Álvarez, la encargada de responder a Rodríguez Calderón con un tono duro a nombre de las seis fracciones que, por acuerdo previo, determinaron que únicamente ella diera respuesta al documento que entregó El Bronco, quien termina su gestión el próximo domingo 3 de octubre a la media noche.

Álvarez García perdió en el 2015 la gubernatura de Nuevo León contra Rodríguez Calderón.

Ahora, la priista le reclamó al Bronco temas como inseguridad, contaminación, finanzas, movilidad, entre otros con los que, simbólicamente, le dio una calificación reprobatoria al primer gobernador sin partido en la historia política moderna de México.

“En general, hay esperanza en que los problemas comunes se resuelvan de manera integral, consensuada y con miras de largo plazo. Tenemos claro que Nuevo León ya no aguanta otros seis años de estancamiento, improvisación y retrocesos. Con respeto, pero con decisión, convocamos al próximo gobierno estatal a trabajar de la mano y dejar atrás la rivalidad política”, dijo al Bronco, que recibió callado las críticas.

La priista le recordó que en su gestión, en la que trabajó con tres legislaturas, se convirtió en el mandatario que más se opuso a las decisiones tomadas por el Congreso Local, al emitir 79 vetos a leyes promulgadas.

Y al enumerar las promesas incumplidas de su administración, señaló que la policía estatal Fuerza Civil, que era ejemplo nacional, llegaría a tener 7 mil 500 elementos, según se comprometió en el arranque. Pero inició el mandato con 3 mil 500 elementos y actualmente cuenta con 5 mil 600 efectivos, por lo que se quedó corto en mil 900

De igual manera le recordó que en el año en que inició su gestión hubo 452 homicidios dolosos y en este año, hasta agosto, la cifra es 797 por lo que la tendencia indica que cerrará en 2021 con más de mil.

De igual manera, señaló que en robos de auto inició el mandato con 552 al año, y hasta agosto de este van 537, por lo que se anticipa un mal cierre en ese rubro.

En violencia familiar Nuevo León está reprobado pues siete de cada 10 delitos son contra mujeres, con 35 feminicidios en este año. Tan solo en agosto hubo mil 981 denuncias de violencia familiar, equivalentes a 64 por día o 2.6 por hora.

La situación de Nuevo León se agrava, porque la mayoría de las víctimas son mujeres, niñas y niños. Y en delitos sexuales, de enero a septiembre del año pasado, se registraron 957 y en este año, en el mismo lapso en el 2021 hay mil 110.

Álvarez le recordó al mandatario que la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas de Nuevo León estuvo por meses sin un titular, nombramiento que correspondía realizar directamente al gobernador.

“Con índices delictivos al alza y una negativa percepción ciudadana en seguridad, las instituciones encargadas de garantizar, promover y proteger los derechos de las víctimas del delito mostraron una débil respuesta”, le mencionó la priista desde la tribuna.

Reconoció las 11 preparatorias militarizadas que construyó e inauguró la presente administración, aunque le remarcó al Gobernador que no fueron superadas las expectativas en materia de infraestructura, ni su mantenimiento ni se normalizaron las condiciones laborales de numerosos maestros.

En tiempos de Covid 19, no hubo educación híbrida de calidad, ni hubo una preparación adecuada para un retorno presencial seguro.

Y así siguió Álvarez al mencionar infraestructura, salud, vialidad y un deficiente combate a la corrupción.

Al finalizar, Rodríguez Calderón se reunió con los reporteros a los que les reprochó que no dieran difusión a sus logros porque no entregó dinero de publicidad oficial a los medios.

Rechazó decir si su sexenio fue un éxito o un fracaso: “No sé, no soy yo quien lo va a calificar”.

Un reducido grupo de personas, en el exterior del recinto, imprecaron a Rodríguez Calderón a gritos, acusándolo de ineptitud y deshonestidad. Uno de los manifestantes dijo llamarse Marco Gaitán y ser estudiante. El aludido no les respondió y dijo que ni los conocía, antes de retirarse.