San Luis Potosí
"Se acabaron los fifís y los chairos", dice Ricardo Gallardo al recibir su constancia de mayoría
El candidato de la coalición PVEM-PT a la gubernatura de San Luis Potosí ofreció su apoyo incondicional lo mismo a empresarios que a clase trabajadora.SAN LUIS POTOSÍ, S.L.P., (proceso.com.mx).- Al recibir la constancia como gobernador electo del estado como candidato ganador de la coalición PVEM-PT, Ricardo Gallardo Cardona anunció que en el estado “se acabaron los fifís, los chairos y los gobiernos gallardistas” y ofreció su apoyo incondicional lo mismo a empresarios que a clase trabajadora.
Gallardo Cardona asumirá el cargo el 26 de septiembre, para los próximos seis años.
“Hoy es el momento de acabar con las campañas negras”, pidió también Gallardo, que a lo largo de su campaña calificó así los señalamientos sobre el proceso penal que enfrentó por acusaciones de presunta delincuencia organizada y sobre el incremento de su patrimonio personal y el de su familia.
Gallardo Cardona obtuvo el 37. 6 por ciento de la votación total emitida el domingo 6 de junio, que se traduce en 458 mil 82 votos, la mayoría que le dio el triunfo reconocido este domingo de manera formal por el Consejo estatal electoral y de participación ciudadana, el CEEPAC.
Su más cercano competidor, el panista Octavio Pedroza Gaitán –de la coalición “Sí por México”– quedó a 4.7 por ciento de diferencia de Gallardo, con 400 mil 273 votos, que representan el 32. 2 por ciento.
Al concluir el cómputo de la elección de gobernador la mañana del domingo, la presidenta del CEEPAC Laura Elena Fonseca Leal informó que se emitieron un total de un millón 215 mil votos (de los cuales poco más de 42 mil 200 fueron nulos), para alcanzar una participación ciudadana del 58.76 por ciento.
Este porcentaje quedó muy por arriba de la media nacional reportada por el INE, que fue del 52.6 por ciento, resaltó la presidenta del organismo electoral.
Fonseca Leal también recordó que en el proceso de cómputo fueron abiertos para recuento más del 70 por ciento de los paquetes electorales.
“Hoy contamos con autoridades electas, resultado de un trabajo coordinado entre funcionarios de casilla, capacitadores electorales, representantes de partidos políticos y observadores electorales”, dijo la presidenta del consejo.
En su mensaje, el gobernador electo dejó atrás la diatriba empleada precisamente contra la consejera presidenta Laura Elena Fonseca, a quien apenas el lunes reclamaba públicamente desde la Plaza Fundadores con acusaciones de haber interrumpido el PREP y de estar “pateando el bote” para no entregarle la constancia, que quería recibir desde ese mismo día.
Este domingo, desde la sede del CEEPAC Ricardo Gallardo reconoció el trabajo del consejo y el personal del organismo.
“La confianza al CEEPAC y al INE fue superior a cualquier denostación que hiciera cualquier persona; es por eso que tuvimos una gran votación”, afirmó, para luego asegurar –contra sus palabras del lunes 7-– que “no se puede poner en tela de juicio al organismo”.
El evento formal de la entrega de la constancia fue conducido por colaboradores de Gallardo Cardona que pidieron aplausos y llevaron pirotecnia para la ocasión.
Mientras el candidato electo ofreció respeto a cada uno de los potosinos, a quienes votaron por él y a quienes lo hicieron por otras candidaturas y partidos.
A los integrantes de la coalición PVEM-PT que lo llevó a la gubernatura, Gallardo Cardona se dirigió de con estas palabras:
“Dios los bendiga porque vamos a seguir cosechando triunfos juntos, una bendición”.
Reiteró que deben eliminarse las etiquetas de “chairos” y “fifís”; “vamos a vivir todos bajo una misma bandera, potosinos trabajadores, sin ponerle ningún apodo a ningún potosino, todos merecen respeto. Tendrán un gobernador que defenderá siempre las causas desde los empresarios hasta la gente trabajadora”, aseguró.
Y mientras a los empresarios ofreció el apoyo incondicional de su gobierno, a la gente trabajadora le dijo que “tendrá ahora sí lo que se merecen, tendrán oportunidad de vida”.
En su mensaje también reconoció a los actores políticos de todos los partidos y llamó a este proceso “una fiesta de la democracia”.