MONTERREY, N. L., (apro).- Actualmente en Nuevo León operan cuatro grandes cárteles y su principal negocio es el del tráfico de migrantes y de combustible sustraído, más que el de la droga, reveló la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) al presentar una radiografía de la delincuencia local.

Los grupos criminales son Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Del Golfo (CDG), Del Noreste (CDN), de los Beltrán Leyva, procedente de Sinaloa, así como otras células locales de nombre no precisado.

“Parte de esa guerra entre cárteles en la Frontera Chica, en los límites de Nuevo León con Tamaulipas, más que por droga el problema es por el tráfico de personas y el huachicol. Las drogas como quiera pasan porque el consumo se sigue dando, pero esa parte de ahí es el pleito y nos afecta, porque por aquí pasan”, dijo Aldo Fasci, titular de la SSPE.

Refirió que la oleada de haitianos que se registró recientemente en la entidad, es por personas que en el tránsito se resguardaban en refugios de migrantes del acecho de criminales.

En una exposición de la situación criminal en la entidad, el comisario de la policía estatal Fuerza Civil, Jorge Fernando Garza, expuso que estas organizaciones no operan por completo en la entidad, si no que las personas que trabajan para ellos hacen distribución de drogas.

Estos grupos se disputan, además del trasiego de narcóticos, el de indocumentados, de armamento, y robo de hidrocarburos y vehículos.

Es el CDN el que más distribuye mercancía ilegal en la entidad, dijo Garza en la presentación de una radiografía del crimen organizado en la localidad, en la que, dijo, están involucrados, también, delincuentes procedentes de Coahuila, Tamaulipas y Sinaloa.

Garza dijo que los criminales ya utilizan armamento de guerra como fusiles calibre 50 y tanquetas artesanales, por lo que es importante que participe también el Ejército para enfrentarlos, y aclaró que los soldados y los policías saben usar mejor las armas, por lo que ganan, por lo general, cuando hay intercambio de fuego.

Por su parte, Fasci Zuazua explicó que las células locales, que compran la mercancía a los cárteles grandes, son los responsables de la mayoría de los homicidios que se reportan por la venta de estupefacientes en la zona metropolitana de la entidad.

Reconoció que actualmente los criminales están mejor armados que hace una década, debido al tráfico de armas que procede en el 95% de Estados Unidos.