TOLUCA, Edomex (apro).- Raciel Pérez, alcalde de Tlalnepantla, adelantó que en torno al cerro del Chiquihuite existen otros puntos que representan riesgos ante eventuales deslaves, por lo que además de las 11 viviendas demolidas y 298 familias hasta ahora evacuadas, podrían desalojarse otros inmuebles.

Sin embargo, reconoció que desconocen el número preciso de personas a reubicar, pues el gobierno municipal carece de la capacidad técnica para realizar los estudios que determinen posibles afectaciones y verdaderas necesidades, por lo que pidió a las administraciones estatal y federal actuar en consecuencia. 

“Es necesario un estudio técnico, las capacidades del gobierno municipal no nos dan para definir exactamente. Las capacidades técnicas y presupuestales de un gobierno municipal son rebasadas, no las tenemos”, admitió. 

Por lo que toca a la autoridad local, afirmó que el ayuntamiento ha dado respuesta y no ha escatimado esfuerzos con los afectados de la conocida como “zona cero”, a quienes, con base en el censo realizado por el gobierno federal, se ha proporcionado una primera de tres ministraciones mensuales por 5 mil pesos, que por ahora les permitirá arrendar una vivienda.

Adicionalmente, afirmó que el gobierno municipal ya puso a disposición del federal varios terrenos de su propiedad ubicados en la zona oriente, que cuentan con escrituración y servicios públicos para que, eventualmente, se puedan construir ahí las viviendas de las familias evacuadas.

La intención, refirió, es reubicar no sólo a las personas dañadas de la zona cero, sino a los vecinos de otros puntos de la ladera del cerro susceptibles de ser afectados por otro desgajamiento, cuyo número está en función del estudio técnico que deben realizar las autoridades estatal y federal.

Los predios de reubicación, abundó, prácticamente se encuentran listos y, si se deseara, mañana mismo se podrían meter las máquinas para comenzar a construir las viviendas para las familias evacuadas, aunque esa determinación compete a la administración federal.

Cruz Pérez aprovechó para denunciar que algunas personas han declarado ante medios de comunicación que no han recibido apoyo, movidos por “pseudo líderes” que han puesto en práctica el dicho “a río revuelto, ganancia de pescadores”. “Quieren sacar raja, beneficiarse, dividir mintiendo, manipulando a la gente”, señaló.

Y precisó que los apoyos están siendo entregados de manera directa por el Ejército mexicano, sin intermediarios, con base en los padrones que parten de los datos recopilados en las mesas de información. 

“Tratamos que el padrón sea lo más fidedigno posible, y ahora resulta que hay personas que no viven en la zona del siniestro y comienzan a reclamar apoyos, no están actuando de buena fe”, concluyó.