XALAPA, Ver. (apro).- Miguel Ángel Sulvaran, un chef de 25 años, fue asesinado el fin de semana en su departamento en el Centro Histórico de Xalapa. Su victimario le asestó 17 puñaladas y con una bolsa de plástico le enredó la cabeza.

Un amigo de Miguel Ángel fue quien descubrió su cuerpo ya sin signos vitales y dio aviso a las autoridades. Sulvaran se había mudado de su natal San Andrés Tuxtla para trabajar en la capital del estado.

De acuerdo con Benjamín Callejas Hernández, presidente de la Coalición Estatal de la Diversidad Sexual van 18 crímenes de odio en lo que va del año.

En los últimos dos meses -insistió- se han registrado tres asesinatos con mucha saña de personas de la comunidad LGTB, sin que la Fiscalía General del Estado (FGE) entregue resultados.

“En Minatitlán recordaremos el caso del compañero que se dedicaba al diseño de modas, no tiene ni una semana de lo que pasó en Veracruz con Luis Felipe (estudiante de la Universidad Veracruzana) y desafortunadamente este fin de semana nos enteramos que un compañero de San Andrés Tuxtla pierde la vida en crueles condiciones”.

Familiares de Miguel Ángel solicitarán a las autoridades que exijan a los negocios que están cerca del domicilio del chef que muestren los videos de las cámaras de videovigilancia para tener pruebas que permitan esclarecer el caso.

“Hablamos con la familia y va a solicitar que expongan los videos de los negocios, de los domicilios cercanos a dónde vivía Miguel Ángel, para ampliar su declaración y que la misma Fiscalía tenga los elementos para ver si hay responsables y empiecen a dar con la identidad de estos agresores”.

Los mismos colectivos en defensa de la diversidad sexual han revelado que el 90 por ciento de los crímenes de odio por homofobia quedan en la impunidad.

En Veracruz en lo que va del año se han cometido mil, 400 homicidios según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), de estos, 50 corresponden a feminicidios y según colectivos de la diversidad sexual, 18 asesinatos podrían ser catalogados como crímenes de odio.