MONTERREY, N.L. (proceso.com.mx).- El secretario de Salud de Nuevo León, Manuel de la O Cavazos, se dijo molesto por la decisión del gobierno federal de almacenar en la entidad las vacunas contra el covid-19 que serán aplicadas en Coahuila, cuando la urgencia de la pandemia demanda su uso inmediato.

Enfadado, dijo desconocer por qué las personas que se encuentran en un escritorio tomaron esta determinación, que innecesariamente demora la distribución del biológico, que el sábado llegó al Aeropuerto Internacional de Monterrey.

“Todavía están almacenadas las vacunas en Nuevo León. Imagínense, tener vacunas y no las aplicamos. Eso a mí me molesta. Y tengo que ser claro y decirlo: ¡estamos en una pandemia, en una guerra contra un enemigo invisible”, dijo el funcionario en la conferencia diaria para actualizar cifras de coronavirus en la entidad.

Consideró que tener las vacunas almacenadas cuando miles de personas las necesitan, es como si la ciudadanía anduviera por el desierto y estuviera guardada el agua que está al alcance de la mano.

Explicó que el lote de 8 mil 775 vacunas de Pfizer que está almacenado en el aeropuerto regiomontano, en espera de ser transportadas a Saltillo, podrían ser aplicado entre la población en el transcurso de medio día, de acuerdo a su experiencia en brigadas médicas.

“No las podemos usar ni Nuevo León ni Coahuila. Estamos en guerra, los pacientes se nos están muriendo. Las necesitamos ya. En un día que estuve en una colonia, en el municipio de Monterrey, vacunamos a 14 mil personas, en una mañana. En un rato que nos den las vacunas, las ponemos en media mañana todas esas vacunas que tienen almacenadas ahí, si nos las dan”, aseguró el vocero del coronavirus en la entidad.

El sábado, después de que llegara al aeropuerto local el embarque, De la O dijo que la población de Nuevo León “se quedará como el chinito: nomás milando”, pues serían enviadas para su uso al vecino estado.

Criticó la logística creada desde el gobierno federal, para que las dosis lleguen paulatinamente a los estados, con una lentitud ocasionada por la burocracia que no puede ser aceptada.

“Estamos en una situación crítica y los que vemos pacientes, a los que se nos han muerto y hemos llorado con sus familias, lo sentimos. Estar en un escritorio tomando café y viendo papeles es a todo dar, pero no es correcto. Debemos ser mucho más veloces que el virus, que es más rápido que nosotros. La vacuna que llegue debe ser aplicada inmediatamente. No hay qué hacer burocracia. El gobierno es lento, obeso, difícil de moverlo”, lamentó De la O.

Hasta este domingo se reportan en Nuevo León, en cifras acumuladas, 120 mil 887 contagiados, con 6 mil 419 fallecidos.